“Buenas noches Eva,
Cierto, la libertad es dinero.
Cansada de enviar cv después de 14 años,en casa. Ahora separada, sin casi experiencia y con 2 hijos menores, estoy sin trabajo.
El dinero es libertad. Mi ex se encarga de momento. No parece que quiera el día a día con los niños. El mayor es tea y tdah. Hace 3 años creí volver a la vida. Poder estudiar, hoy enviando cv que sólo responden descartada, con 42 años, con 2 hijos y sin saber si mañana seguiré a su lado. Sin recursos es difícil.
Di 14 años a cambio de cuidar de los niños y que él no tuviera más preocupación que trabajar. Ahora no me,queda nada. Muy vieja o muy joven. Vieja para el trabajo joven para cualquier ayuda.
Él tiene su trabajo, el piso que será suyo, poder pedir la custodia cuando quiera.
Creí tener futuro, hoy no se ni si tendré presente.
El dinero es libertad si es tuyo, esclavitud cuando es de tu ex.”
A veces hablo de dinero y a la gente le parece frívolo. Me lo arroja a la cara como un tema del que no hay que hablar. Pero después recibo este tipo de emails en mi buzón y se me pasa. Es en ese momento cuando me doy cuenta de lo necesario que es una formación empresarial, financiera y económica.
Ya me di cuenta en mi primer y segundo programa de emprendedoras seguido por más de 1500 personas. En realidad de todos los programas que tenían un eje claro, enseñar a los demás lo que yo sé y que me ha permitido ganar dinero y hacerme con una buena carrera profesional.
Yo ahora estoy separada. Ahora entiendo más que nunca cuan importante es ser libre en lo financiero cuando ya no hay un “equipo”. Pero igual le pasa a montones de mujeres que hoy son las que sostienen su hogar.
Si eres de mi generación ya no soñabas con un trabajo fijo al terminar tus estudios. Porque prácticamente no los hay e incluso en el sector público puedes tardar años en conseguirlo. Lo cual limita prácticamente todos tus años jóvenes y fértiles. Y esto lo digo por mis queridas mamis que por aquí me siguen.
Mi historia se parece a las de muchas mujeres de mi generación. Bien formada a antes de los treinta tenía un buen puesto de trabajo antes de la crisis. De ese puesto me despidieron por tener un niño. Después decidí emprender. Y más tarde me separé del padre de mi hijo. Puedes alterar el órden de los factores y tendrás la historia de miles de mujeres de mi generación.
Ahora en la crisis, la formación que no sea práctica, puedes descartarla. Necesitas saber hacer cosas. Y ya si se trata de ganar dinero de manera activa o pasiva es fundamental. Activa en trabajo por cuenta propia o ajena y pasiva en inversiones o especulación como la bolsa.
Pero antes que nada, el primer paso para alcanzar una libertad financiera es aliviar en lo más posible la presión de los gastos fijos. Esos son aquellos que no nos hacen ganar más dinero, sino que mes a mes nos presionan más a nuestra economía. Es un buen momento para marcar esta semana buscar nuevas ofertas de teléfono, de luz, Internet, seguros, etc…
Yo prescindí del coche, lo cual me ahorra un montón de gastos que realmente no necesitaba tanto. De hecho soy feliz. Me muevo más, desperdicio menos el tiempo en idas y venidas, reduzco mis compras a la cesta de la bicicleta y me hace sentir más cerca de mi abuelo. Mi abuelo es mi inspiración en el tema de formación, con formación al alcance de todos. Maestro de escuela, él no tenía coche ni yo tampoco. Me siento más cerca de ese sentido de humildad y menos necesidad. Mi hijo en un colegio público al lado de casa. No necesito más.
El primer paso es ese. No puedes construir nada cuando el dinero que necesitas liberar y la presión financiera es fuerte. Necesitas reducir al máximo y te aseguro que encontrarás menos sorpresas.
Si haces una vida más productiva con menos ropa, menos decoración en la casa, menos de todo lo que no necesitas te vas a sorprender. Porque no se trata de carencia, sino de limpieza de consumo. De la sana costumbre de servirnos de lo que necesitamos nada más. De liberar RECURSOS. Tanto tiempo (limpiar, planchar menos por ejemplo), espacio (más espacio para trabajar, diseñar planes, que entren cosas nuevas), dinero (menos necesidad de tener todos los productos de limpieza para prendas especiales, para almacenar)… Para nada.
Aprender lo que es importante. Y el dinero lo es. Si entiendes el concepto de dinero como energía te será más difícil desperdiciarla en cosas que no te generan biestar ni presente ni futuro.
Y es que en la lucha del EGO llegamos a confundir lo que tenemos con lo que somos. Las acumulaciones como símbolo de éxito. Cuando el verdadero éxito es vivir tranquilo y feliz y tener las menos cosas de las que preocuparnos en la vida que no son importantes. Centrarnos en la familia, los amigos y sin olvidar nunca nuestra búsqueda personal.
Por eso hablo de dinero como energía. Generar energía. Conseguir energía. Multiplicar la energía.
Y esa es una de las cosas de la que quiero que hablemos también el día 29 en Sevilla en la Conferencia de Mujeres y DInero.
Una cosa más, si te gusta comparte este artículo en redes socailes… Dicen que cambio vidas.