La llegada del buen tiempo nos recuerda que es el momento ideal para plantarle cara a la celulitis y a la grasa que hemos ido acumulando durante el invierno.
Al menos eso es lo que me ha pasado a mí y, en seguida, me he puesto manos a la obra para conseguir entrar en el bikini un año más.
Este año he decidido inaugurar la operación bikini con el Programa Dúo Reductor de Montibello.
El pack, que cuesta 38,50€, incluye dos productos:
1. Reducer Gel Cream (200 ml), una crema de textura gel con acción reductora.
2. Lipocell Booster Serum (125 ml), tratamiento de shock en spry que actúa sobre los cúmulos de grasa más persistentes (viene de regalo con el pack).
Se recomienda para tratar zonas problemáticas como las caderas, los glúteos y el abdomen.
Primero hay que aplicar el booster para potenciar el efecto del gel que usaremos posteriormente.
Para una mayor efectividad se debe aplicar por la mañana y por la noche.
MI OPINIÓN
Nunca antes había probado ningún tratamiento corporal de Montibello pero había escuchado maravillas no sólo de los tratamientos en casa sino de los que se realizan el cabina.
Y, en general, hay que admitir que las marcas que tienen tratamientos en cabina, suelen tener líneas cosméticas fabulosas que dan unos resultados muy buenos y que, lo más importante, te puedes llevar a casa.
Así que comencé a usar el Programa Dúo Reductor de Montibello con unas expectativas muy altas y con la esperanza de que no me defraudara y, por suerte, no lo hizo.
Tal y como se recomienda, lo uso a diario por la mañana y por la noche.
Aunque se aconseja aplicarlo en caderas, glúteos y abdomen, yo también lo estoy usando en los muslos porque en esa zona también he notado falta de firmeza.
Tal y como ocurre con Somatoline Cosmetic Reductor Intensivo Noche 10, ambos productos producen calor que es lo que ayuda a quemar - y nunca mejor dicho - las grasas.
Después de aplicarlo se nota calor y la zona se enrojece así que no os asustéis que es normal en este tipo de productos.
Además, este enrojecimiento y sensación de haberse quemado después de tomar el sol desaparece en poco tiempo, más o menos en una media hora (algo que puede variar dependiendo de cada piel).
Lo único que, si os vais a poner falda o pantalón corto, os recomiendo aplicarlo una hora antes para desaparezca totalmente el enrojecimiento y no salir a la calle como un cangrejo.
Y muy importante también lavarse muy bien las manos después de su uso para evitar que ocurra lo mismo con ellas.
En cuanto a la textura, en ambos casos, es muy ligera.
El booster tiene una textura líquida como el agua y el gel reductor, como su nombre indica, tiene una textura de gel que se aborbe rápidamente lo que permite poderse vestir inmediatamente después de su aplicación.
Llevo usándolo unas dos semanas más o menos y estoy más que satisfecha con el resultado.
He notado que la piel está más lisa y firme y que la ropa, que antes me estaba justa, ahora me está perfecta.
Y en esta ocasión no lo he compaginado con una dieta especial o más ejercicio. Sigo haciendo la misma vida que antes de comenzar con el tratamiento.
Aunque también es verdad que tampoco es que tenga mucha flacidez, acumulación de grasa ni celulitis y, por ello, también puede ser que haya notado mejores resultados.
Sea como sea, ambos productos funcionan y estoy segura de que, combinados con una alimentación sana y ejercicio, pueden ser muy efectivos incluso en los casos más difíciles.
¿Qué opináis vosotras?
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