Propiedades de la acerola

La Acerola también es conocida como La cereza de las Indias Occidentales o Cereza de las Antillas. Es una de los frutas con más vitamina C y multitud de usos medicinales.

El nombre de acerola fue dado por los conquistadores españoles y proviene del árabe hispánico. Y su nombre científico es Malpighia Ermaginata.

¿Que es la acerola?

La acerola es una fruta tropical que nace de un pequeño árbol o arbusto que mide entre 3-6 metros de altura procedente de Sudamérica, Centroamérica, Caribe y Brasil. Tiene una forma redondeada de color rojo o amarillo y se asemeja muchísimo a una cereza exteriormente.

No es muy conocida, parece ser que es complicada de transportar y se deteriora con facilidad.

Su sabor es agridulce y se le conoce principalmente por su contenido en vitamina C. Para hacernos una idea, la naranja que es la fruta que más asociada está a la vitamina C tiene entre 500-400 parte por millón, mientras que la acerola está entre 16000-172000, es decir de un gramo a dos por 100 gramos, luego tiene de “20 a 30 veces más vitamina C que la naranja”.

Composición nutricional

El agua que forma parte de la mayoría de su peso, como en muchísimas frutas.
Tiene muy pocas proteínas, grasas y un poco más de hidratos de carbono, aún así su contenido calórico es muy bajo.
Vitaminas: concretamente la C, B1 y B2.
Antioxidantes: bioflavonoides, polifenoles y antocianos (que dan el color rojo a la fruta).
Minerales: Magnesio, Calcio, Hierro y Potasio.

Propiedades y usos de la acerola

Por su contenido en vitamina C nos ayuda a prevenir gripe, catarro, resfriados, etc. pues es inmunoestimulante y refuerza las defensas contra gérmenes y virus.
Es un gran tónico corporal por esto se usa en casos de cansancio, agotamiento, anemias, después de enfermedades, etc nos puede ayudar. Además colabora en la producción de hormonas anti-stress como la melatonina.
Ayuda a depurar el organismo y proteger gracias a sus minerales y antioxidantes.
Ayuda a la formación de colágeno en huesos, articulaciones, vasos sanguíneos, tejido extracelular, etc.
Mejora nuestra piel y el cabello por su contenido en vitaminas y minerales.
Tiene propiedades fungicidas, es decir, lo usaremos para combatir hongos.
Útil en prevención de enfermedades degenerativas y cardiovasculares.
Actúa como un antihistamínico por la vitamina C.
Mejora la coagulación de la sangre y acelera la cicatrización de las heridas.
Ayuda a disminuir inflamaciones debido al contenido en antocianinas.
Es un buen quelante de metales pesados.