Revista Cultura y Ocio

Prosopagnosia, cuando tu cara no me suena

Publicado el 25 junio 2014 por Enrique Gutiérrez @InfoFragmentos
Nos encontramos con esta enfermedad cerebral cuando una persona es incapaz de reconocer rostros de familiares o incluso su propio rostro. Este término fue acuñado por el neurólogo alemán Joachim Bodamer en 1948, y la descripción que hizo este médico fue la de una forma de agnosia que impide reconocer las caras familiares, normalmente se debe a una lesión neurológica de los lóbulos temporoccipitales.

Joachim Bodamer

Joachim Bodamer

Este trastorno neurológico normalmente es adquirido aunque se han encontrado casos en los que una persona ha nacido con él.
Entre las causa principales de adquisición de esta enfermedad podemos destacar el haber sufrido un accidente cerebrovascular, traumatismo craneoencefálico, la presencia de un tumor cerebral o incluso por una infección del sistema nervioso. Al ser una lesión de adquirida suele venir acompañada de otro tipo de déficit visuales. Las personas afectadas, como hemos señalado anteriormente, no pueden reconocer los rostros conocidos en cambio sí son capaces de reconocer las distintas partes de un rostro como la nariz, boca, ojos, formas de las cejas o de la barbilla. Por este motivo, para que una persona afectada de prosopagnosia tenga la posibilidad de reconocer a sus conocidos se le enseña a reconocer los rostros de estas por medio del reconocimiento de las distintas partes del rostro.
cara con interrogante
Los síntomas que nos pueden indicar que una persona padece prosopagnosia se pueden resumir en los siguientes, con los cuales podremos enfocar un tratamiento neurológico basado tanto ejercicios como estrategias de compensación ante este trastorno:
  • Falta de reconocimiento de rostros.
  • No existen deficiencias visuales.
  • El reconocimiento de rostros en fotografías es más costoso que su reconocimiento directo, estando la persona presente.
  • La persona recuerda quien son sus allegados y familiares pero no sus rostros.
  • Posibilidad de no reconocer su propio rostro, en los casos más graves.

Para evaluar la prosopagnosia se suelen utilizar varias pruebas entre las que vamos a destacar:
  • Test de Reconocimiento Facial de Benton: Consiste en presentar una serie de fotografías de caras no familiares para el paciente en las que se busca el objetivo de correlacionar con grupo de seis fotografías de las caras mostradas en primer lugar tomadas desde distinto ángulo.
  • Test de Reconocimiento Mnésico de Cambridge de Duchaine: compuesto por 72 ítems con una tarea de elección forzada múltiple entre varias caras, similares o no a unas caras "objeto" presentadas previamente con una capacidad discriminativa mayor que en el test anterior.
Actualmente se consideran necesario que exista una lesión bilateral en ambos hemisferios con diferentes combinaciones de las zonas afectadas: témporo-occipital o parieto-occipital, según nos muestran los estudios llevados a cabo por Antonio Damasio y colaboradores (1982). Esperamos que le haya resultado interesante nuestra pequeña aportación a la divulgación de la psicología como ciencia que tiene como objetivo incrementar el desarrollo de la persona para disfrutar de una vida plena. Un saludo.
Fuentes:SaludNeuro Rehabilitación

Volver a la Portada de Logo Paperblog