Prospectivas asombrosas, Prospectiva Nº 11

Prospectiva Nº 11

Cambiarlo todo para que todo siga igual, ¿o tal vez no?: Entender esto si sois capaces, mis amigos mutados y esterilizados: un gobierno central mundial, ya sin disimulo alguno, saliendo en la tele, y el mismo paripé de siempre; y a mayores un “gobierno en la sombra” a nivel interno del planeta, sin realizar cambios apreciables. Hacer creer a la gente bienpensante que todo ha cambiado, cuando la realidad seguirá siendo la misma que hace cien años, y más atrás. Pensamiento ramplón y materialista, consumismo forzado; rodeados de penurias nuestros servidores públicos seguirán con la misma corrupción de siglos pasados.

Un gran banco central que maneje todas las finanzas del planeta, con sucursales por zonas territoriales, (pero manteniendo la esclavitud humana mediante el dinero, esa fantasía tan cruel) y un grupo de “gente foránea”, escondidos donde el diablo perdió el tenedor, controlando la ejecución de esta programación que voy pillando, por los pelos, pero pillando.

Soy lector más o menos complusivo de periódicos, desde que aprendí a leer, pero es que la mayoría de los días las únicas noticias reales, comprobables, con verosimilitud, son: las esquelas.

En tres años, a partir de la fecha de los corrientes, quieren que este plan sea de aplicación mundial. ¿Nos vamos enterando? Para ello continuarán con sus planes alternativos de esterilización de millones y millones de personas. Humanas. Seguimos más a brevas que a higos en este asunto.

Una de las ideas que intentarán poner en marcha y que serán fáciles de visualizar: tirar abajo todo el sistema de granjas actuales, con miles de gallinas, cerdos, visones, de todo, allí estabulados y comiéndose su propia mierda. Por un covi u otro enjendro similar echar abajo todo ese tipo de negocios nefastos. ¿Qué os parece la idea? Pues está en marcha.

Nuevas redes de comunicaciones basadas en fibra óptica, de última generación, mejorarán bastante lo que tenemos hoy día, así pues no daré pábilo a una insurrección violenta, al menos poco pacífica, contra toda esa ingente cantidad de “antenas” que han puesto por todas partes. La mayor parte de la información puede correr por esos cables, ¡y sin contaminación atmosférica!

Daniel Paniagua Díez