Este afiche acompañó la presentación del film en el 16º BAFICI.
Para el jueves 7 de abril está programado el estreno en el cine Gaumont de Juana a los 12, grata sorpresa nacional del BAFICI de 2014. El retrato de una pre-adolescente solitaria, inasible para los profesores de un exclusivo colegio inglés del conurbano bonaerense, algo desconcertante para su madre, invisible para sus compañeros, futura paciente crónica de psicopedagogas con cronómetro en mano impacta no sólo por sus virtudes varias sino por tratarse de la opera prima de un joven realizador: Martín Shanly, de entonces 26 años.
En efecto, resulta un hallazgo este guionista y director capaz de retrotraernos a nuestra pubertad, aún cuando ésta haya tenido características distintas de las de la protagonista. En una hora y cuarto, Shanly consigue trasladarnos a ese tierra de nadie que habitamos cuando abandonamos la infancia y resistimos el ingreso al mundo de los mayores. Acaso la pesadilla de Juana sea la escena que ilustra de manera más explícita la sensación de no pertenencia y de consecuente desprotección frente a adultos sanguinarios.
El realizador transmite un conocimiento sólido del personaje y sus circunstancias. Con innegables aptitudes narrativas y técnicas, consigue sumergirnos en la vida de Juana y hacernos olvidar por completo la mediación de la cámara. De esta manera, asistimos con ella al colegio, a las clases particulares de apoyo, a las consultas psicopedagógicas, a los centros especializados en estudios médicos, a una ansiada fiesta de disfraces.
Rosario Shanly -hermana del realizador- es la otra gran revelación del largometraje. Encarna a la protagonista de manera convincente, con un encomiable manejo de silencios y miradas.