Se acerca el verano, y la playa será la constante de muchos. Lucir el cuerpo que deseamos fue el objetivo del último año, y ahora que el entrenamiento ha dado más o menos resultados… ¿Cómo hacer que nuestro cuerpo luzca más atractivo?
Para muchos, la respuesta está clara: ¡hay que coger color!
¿QUÉ OCURRE CUANDO NUESTRA PIEL SE BRONCEA?
Que tengamos un color más o menos oscuro, depende de la melanina, un pigmento que se produce en las capas inferiores de la piel. Ésta no es producida por el cuerpo de manera constante, sino que se segrega cuando entramos en contacto directo con el sol. Es un mecanismo de defensa ante los rayos ultravioletas que pueden dañar el ADN o ARN de la piel.
Cuando nos “quemamos” realmente lo que ha ocurrido es que estos rayos han penetrado la dermis y alterado o destruido nuestro ADN o ARN (sí, por un breve tiempo y en una zona de nuestro cuerpo, nos ha ocurrido igual que a muchos superhéroes, pero sin desarrollar superpoderes).
La melanina oscurece nuestra piel para que reaccione mejor frente al sol. Los ojos, pelo y piel oscura son más efectivos frente a las radiaciones ya que las absorben mejor, evitando que lleguen al interior de nuestro cuerpo.
Es por esto que debemos tomar el sol con precaución, ya que aunque tiene beneficios, si nos descuidamos puede ser fatal.
También debemos comprender que cada uno tiene un tono de piel específico. Si tu piel es muy blanca, deberás protegerla mucho más y entender que te llevará mucho más tiempo conseguir cambios visibles. Acepta tu color base, y mejóralo dentro de tus posibilidades.
BENEFICIOS Y PERJUICIOS DE TOMAR EL SOL
- Al entrar en contacto con el sol, nuestro cuerpo produce vitamina D.
- El sol, por tanto, fortalece huesos y dientes.
- Mejora el estado de ánimo.
- Mejora tu piel. Si tienes acné, media hora de sol al día (en la mañana o la tarde, no en su cénit), puede favorecer la limpieza de la dermis.
- La luz es necesaria para metabolizar el colesterol. Por lo tanto, tomar el sol ayuda a tu corazón.
- La vitamina D protege frente a ciertos tipos de cáncer.
- Mejora la calidad del sueño y la vida sexual.
- Protege de la esclerosis múltiple.
- Un exceso de exposición puede provocar cáncer de piel.
- Esto es especialmente sensible en áreas con lunares, manchas en la piel, o tatuajes.
- Seca la piel, lo que puede venir bien en casos específicos como el acné, pero que debe ser tenido en cuenta en la post-exposición.
CONSEJOS PARA CONSEGUIR UN BUEN MORENO
Aunque luego diremos qué alimentos favorecen el bronceado, vamos a empezar con algunas pautas que todos deberíamos seguir para exponernos al sol de forma segura:
- Evitar la exposición en las horas puntas del día, cuando el sol está en lo más alto.
- Usar protección con factor alto siempre, y renovarla cada hora, o cada vez que nos mojemos o creamos que hemos perdido la capa protectora.
- Empezar la exposición por un período de tiempo corto, e ir aumentando poco a poco, aunque nunca ininterrumpidamente más de una hora (o incluso menos sería recomendable).
- Cuidado con tomar el sol estando mojados… ¡el agua hará efecto lupa!
- Proteger nuestra cabeza y cara. Ten en cuenta que la cara siempre está expuesta al sol en el día a día. No te preocupes si no la expones cuando tomar el sol deliberadamente.
- Salud antes que belleza: cuidado con los golpes de calor, mareos y tiempos de exposición desmedidos.
- Bebe mucha agua: el sol seca la piel. Mantente hidratado.
- Es aconsejable usar una crema hidratante tras la exposición.
ALIMENTOS QUE POTENCIAN TU BRONCEADO
Para que nuestro cuerpo estimule la producción de melanina, tenemos que darle:
- Vitamina A: es liposoluble, y se almacena en el hígado. Se produce a partir de los caroteinoides presentes en frutas y verduras. Alimentos ricos en esta vitamina son: pescado, calabaza, naranjas, zanahorias… De las frutas y verduras, todas de color anaranjado y amarillo, ya que es el color indicador de caroteinoides. También presente en vegetales de color verde intenso, como las espinacas.
- Vitamina C: además de mejorar el sistema inmune y ayudar en la absorción de hierro, esta vitamina estimula la creación de colágeno en la piel. Podemos obtenerla de cítricos (naranjas y limón), brócoli, fresas, pomelos, kiwi o pimientos rojos. Si se combina con la vitamina E, será más eficaz.
- Vitamina E: es un antioxidante, destruye radicales libres. Suele encontrarse en alimentos que también son ricos en grasas, por lo que hay que tener cuidado. Está en las nueces, semillas, vegetales de hojas verdes, aceites vegetales, huevos, germen de trigo y granos enteros. Funciona mejor combinada con la vitamina C.
- Minerales: cobre, hierro y selenio. El selenio actúa como antioxidante, y el hierro y el cobre ayudan a dar buen tono a tu piel. Además, el hierro y la vitamina C son buenos aliados, ya que la vitamina C mejora la absorción de éste. Podemos tomarlo de carnes, legumbres, frutos secos, germen de trigo, levadura de cerveza, cereales integrales, ciruelas pasas, guisantes… (Podéis ver un listado de alimentos ricos en hierro en este artículo).
- Bioflavonoides: se toma de las plantas, y tiene efecto antioxidante, además de estimular la formación de colágeno. Está presente en frutos rojos (el tomate se clasifica como fruta). También en el ajo.
- Grasas poliinsaturadas: evitan el desecamiento de la piel, y dan un bronceado más uniforme. Podemos encontrarlas en pescados azules, frutos secos o aceite de oliva.
- Agua: primordial para mantener la piel hidratada y bella.
No hemos dado una lista de alimentos completa, ya que sería muy extensa. Hemos preferido mostrar qué debemos buscar en un alimento, qué elementos van a ayudarnos con nuestro moreno… ¡Ahora toca ser creativo en la cocina!