La policía vegana son una serie de ciberpersonas que ocupan su tiempo en denunciar actos y quitar el carnet de vegano y a veces incluso, el de buena persona a cualquier tipo de ser que fomente el consumo de alimentos veganos, ya sea por un canal o por otro.
La policía vegana está formada por agentes y agentas secretas, nunca tienen foto de perfil y si la tienen es de otra persona que no vive cerca, van de paisano para que no los reconozcan. Este tipo de policía utiliza la mayor parte de su cibertiempo en quejarse de cosas que dice la gente por redes sociales y en ser mucho más veganos de los demás. Lo más curioso de todo es que muchas veces la policía vegana ni siquiera es vegana, pero te dicen las cosas por si acaso no lo sabes.
La policía vegana no come tofu de las tiendas asiáticas, no toma el café con agave ni stevia porque es igual de malo y te sube la glucosa una pasada, no comen soja porque es malísima, viven todos en el campo en casas recicladas, tienen su propio huerto, cocinan con leña, hacen su propio pan de masa madre y no se tiñen ni nada, solamente cuando van a la ciudad para camuflarse y poder seguir haciendo su trabajo de denuncia.
A los agentes secretos no les gusta el azúcar ni ver marcas en cuentas de Instagram si hay dinero de por medio, pero si no lo hay, no pasa nada. Saben perfectamente cuándo te están pagando por colaborar con alguna marca y no lo estás diciendo y haces publicidad encubierta porque ellos tienen personas infiltradas en todas partes, se meten en nuestras cuentas de correo, es nuestras redes sociales para poder saltar a la mínima y saben absolutamente todo.
La policía vegana tiene la obligación de escribir borde, sin decir holi ni nada, de forma maleducada, se comen las tildes porque tienen B12 y se preocupan mucho más de criticar eso tan horrible que has hecho en lugar de ver el trabajo que cuesta mantener un blog y unas redes, el servicio y la información que ofrecemos desinteresadamente todo el rato no es nada relevante en comparación con esa frase que has dicho o esa copa de vino que te has bebido y que dónde está Sanidad para este tipo de cosas.
En la dura formación para entrar a la policía vegana, les quitan la empatía, la sonrisa, la ropa de Zara y además, les hacen aprenderse de memoria todos los E-XXX para poder detectarlos incluso a 3 metros de distancia con mirar rápidamente los ingredientes de algún producto, aunque tengan la letra muy pequeña. Además todos los agentes secretos, son nutricionistas, dietistas, periodistas y muchos de ellos fotógrafos y diseñadores también.
He conseguido hablar con un agente secreto de la policía que intercepté en gordivegans y con el cual a través de una cuenta falsa en la que fingí ser del DANVV, es decir, Departamento de Acciones Navideñas y Vacaciones de Verano de la policía vegana, gracias a eso, conseguí hablar con él.
No puedo poner la conversación explícita por un tema de protección de datos, pero en el departamento en el que trabajaba él, que era el de Ultraprocesados del Infierno y Azúcar para los Niños, me dijo que todo lo que requisaban luego se lo comían, que fuera de las redes cambiaba la historia, que menudos festines de pollo vegano y tartas de zanahoria se pegaban, incluso me invitó a unirme a uno de sus eventos, este sábado iban a hacer una cena con un cargamento de bollos para un evento que habían interceptado y luego se iban a una rave en un parking de Fuenlabrada a darlo todo.
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