La Organización Mundial de la Salud la define como la profesión sanitaria “que se ocupa del diagnóstico, tratamiento y prevención de los trastornos del sistema neuromusculoesquelético y de los efectos de dichos trastornos sobre la salud en general”, fue fundada por Daniel David Palmer en 1895 y está basada en técnicas de ajustes, las cuales son procedimientos precisos, específicos dirigidos a las articulaciones que presentan alteración en biomecánicas específicas, para con ellas restablecer la movilidad, el funcionamiento articular y disminuir el dolor.
La quiropraxia ha facilitado el estudio de la columna lumbar, sus trastornos y su efecto en el sistema nervioso, en particular de las lumbalgias y su tratamiento como primera causa de discapacidad a nivel global, siendo el quiropráctico uno de los profesionales mejor preparados para el tratamiento de esta entidad, la cual mejora la alineación, alivia el dolor y restaura el movimiento de la columna vertebral o de las articulaciones, a esto se le llama un ajuste de la columna vertebral, también se usa para los dolores de cuello y dolores de cabeza, ya sean agudos o crónicos, hombros, rodillas y mandíbula, así como para acomodar la posición de un bebé antes del parto, cólico infantil, resfriados frecuentes y muchas otras enfermedades.
El quiropráctico además puede indicar ejercicios para ayudar a mejorar la alineación ósea la postura para prevenir lesiones, fomenta conductas sanas, como dejar de fumar y mantener un peso sano, por lo que es un profesional muy útil en la prevención y el tratamiento de las afecciones musculoesqueléticas.
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