Seguro que habéis oído alguna vez este término. ¿Qué significa? La trazabilidad es indispensable en todo producto para saber de dónde viene, cómo viene y qué lleva. Es decir es un proceso por el cual podemos conocer la historia del alimento y saber si cumple los términos de calidad, seguridad y prevención.
Cada producto tiene que venir con una etiqueta donde se identifique el origen de los alimentos, así
como los ingredientes que forman parte del mismo, los controles que ha superado y el trayecto que ha tenido desde el origen hasta las manos del comprador. Así, como consumidores tendremos toda la información necesaria para decidir si comprar o no comprar el alimento. Para identificarlos existen varios sistemas que van desde el código de barras EAN hasta chip de radio frecuencia.En España existe la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición cuyo objetivo es “promover la seguridad alimentaria como aspecto fundamental de la salud pública y ofrecer garantías e información objetiva a los consumidores y agentes económicos con la correspondiente cooperación del resto de administraciones y sectores interesados”. Buscan la transparencia de los productos que van desde el productor hasta el consumidor.
La calidad de los alimentos es un tema que ha preocupado durante años. De hecho desde que se implantó una normativa que sigue las directrices del Reglamento 178/2002 se ha seguido trabajando con el propósito de garantizar la calidad de los alimentos en un mercado globalizado. Además, con todos los datos necesarios, en caso de que haya un problema o riesgo, las autoridades competentes podrán gestionar la situación con mayor rapidez.
Si queréis ampliar información descargaros esta guía para la aplicación del sistema de trazabilidad en la empresa agroalimentaria, elaborada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Está pensada para empresas, pero aclara muchos términos y dudas.