Ultimamente en Intermet y especialmente en el mundo de los bloggers se han puesto varios palabros de moda. Uno de ellos es el de "influencer" (que traducido al lenguaje de Cervantes, supongo que se traduce como influenciador, si es que dicha palabra existe).
¿Que es un influencer si nos referimos a blogs o a Internet? Pues básicamente alguien capaz de poder influir con sus comentarios y post en los demás. Puedes influir dando tu opinión de un producto o servicio, o puedes influir por el mero hecho de hablar de algo.
Las marcas se han dado cuenta del poder que tienen los blogs y -normalmente vía agencias especializadas- se están tratando de aprovechar del bajo coste y alto impacto que puede tener darle el timón de la viralidad de un producto o una marca a cientos de personajes que en ocasiones poco o nada tienen que ver con el mismo, pero que utilizan sus blogs para hablarl del mismo o de cualquier otra cosa.
El ejemplo más claro de un influencer podemos verlo en los bloggers que hablan de tecnología (con conocimiento de causa) y prueban en primicia, dando su experiencia de uso, este o aquel producto. Teléfonos y todo tipo de widgets, de modo que miles de lectores anónimos en Intenrnet tomen su opinión o crítica como un punto más sobre el que apoyarse a la hora de tomar la decisión sobre dicho producto o servicio.
Ultimamente se han puesto de moda los blogs de moda, con un concepto extremadamente básico y superficial. Son blogs de chicas que en ocasiones apenas pasan la veintena (hay de todo, obviamente), en los que de forma natural y con un punto exhibicionista, cuelgan fotos en sus blogs de la ropa que se compran, con algún comentario sobre las prendas compradas.
Lo bueno para las marcas y para las ego-bloggers (así se llaman) es que siempre hablan de lo mismo. Son mono-tema. Y eso en Internet, concretamente en el mundo blogger, te da más cancha para poder llevarte un buen puñañdo de euros al bolsillo. Es mucho mejor centrar tus ideas en una sola cosa que en 200 (como es mi caso), pero a fin de cuentas un blog es una especie de rincón donde dar rienda suelta a tus ideas y expresas aquello que cruza tu mente, se refiera a moda, tecnología, internet, redes sociales, marketing, publicidad, etc... como es mi caso.
Algunos influencers se están forrando gracias a sus opiniones y los miles de seguidores que se hacen eco de las mismas. Las marcas, a su vez, han descubierto una forma muy barata de hacer llegar sus nuevas colecciones o de testar algunas ideas entre su público más fiel. Así que todos contentos.
Solo hay una clave para poder ser considerado un influencer y no un titiritero de pacotilla. Ser auténtico en tus críticas y opiniones. A mi me pagan en ocasiones por comentar sobre este o aquel producto. Y lo hago siempre que el mismo pudiera llegar a haberlo escrito sin esa compensación económica de por medio. Pero siempre doy mi opinión sincera sobre todo lo que comento. Es el riesgo al que se exponen las marcas con los bloggers, pero siempre que elijan a gente con sentido común, pueden asumirlo y seguir viralizando sus productos.