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¿Qué estoy haciendo con mi vida? – Crítica de “Juliet, desnuda” (2018)

Publicado el 02 febrero 2019 por Manuzapata @vivazapatanet
¿Qué estoy haciendo con mi vida? – Crítica de “Juliet, desnuda” (2018)

Al poco de empezar la película vemos a Annie sentada en su despacho. Dirige el museo marítimo de una pequeña localidad costera de Inglaterra. Está preparando una exposición y encuentra una foto muy antigua, en blanco y negro, en la que aparecen dos parejas jóvenes en la playa. La escena le intriga. Me pregunto qué habrá sido de ellos, exclama. En el último tercio de metraje esta secuencia encuentra su eco en otra realmente maravillosa. En plena exposición Annie se topa frente a la instantánea con Edna. La anciana de pelo canoso le explica con mucha gracia que ella es la morena de la izquierda y que la otra chica era su hermana y que habían conocido a esos dos muchachos aquel verano. George, el que aparece a su lado, era un pelín lanzado. Ojalá yo lo hubiera querido, pero lo rechacé. Pensé, Edna, nunca puedes equivocarte si no haces algo, las cosas que haces te meten en problemas. Y aquí estoy, a los 84 años y sin haber tenido un solo problema en toda mi puñetera vida. Maldita sea.

¿Qué estoy haciendo con mi vida? – Crítica de “Juliet, desnuda” (2018)

Lo que escucha activa un clic en su cabeza. Esta reflexión sobre el paso del tiempo, y lo que hacemos (o no) o lo que deberíamos hacer con él, forma el corpus de la tesis que sostiene un relato que toma como macguffin narrativo a una pareja en la que Annie, la parte femenina, cercana a la cuarentena y tras tres lustros de relación, comienza a plantearse que aquello se ha estancado en una estabilidad acomodada en la rutina y la monotonía y que es necesaria una renovación o una evolución hacia otro escenario. Más que nada porque ella ha dejado (casi) de tener vida propia ya que las pasiones de su media naranja han colonizado la suya. El susodicho tiene un blog en el que analiza obsesivamente la obra y los misterios de un cantante semi desconocido de rock alternativo desaparecido desde 1993.

¿Qué estoy haciendo con mi vida? – Crítica de “Juliet, desnuda” (2018)

La crisis sentimental, el discurrir de la existencia y el mirar hacia atrás para descubrir si lo que hemos hecho con ella ha merecido (o sigue mereciendo) realmente la pena, combinado con chaladuras llevadas al límite como el fútbol o la música, son conceptos que aparecen invariablemente en la obra de Nick Hornby. Esta cinta, adaptada de su novela homónima, recoge esos mismos temas recurrentes que ya se trasladaron a la gran pantalla en Fuera de juego o la estupenda Alta Fidelidad.

¿Qué estoy haciendo con mi vida? – Crítica de “Juliet, desnuda” (2018)

Lo realmente original en este filme reside en el desarrollo de este planteamiento a través de un extraño triángulo amoroso en el que la admiración, rayando en el fanatismo, de la parte masculina por otro hombre se transforma en un posible interés afectivo de su pareja por ese mismo tipo. Lo que sucede durante ese proceso, sumado a conceptos como la maternidad latente o la paternidad ausente y al deseo de la protagonista de quitar el pause de su vida para seguir adelante, provoca nuestra adhesión inquebrantable a un trabajo en la línea del mejor cine independiente.

¿Qué estoy haciendo con mi vida? – Crítica de “Juliet, desnuda” (2018)

Copyright del artículo © Manu Zapata Flamarique. Reservados todos los derechos

Copyright imágenes  ©  Bona Fide Productions, Apatow Productions, Rocket Science, Los Angeles Media Fund. Cortesía de Diamond Films. Reservados todos los derechos.

Juliet, desnuda

Dirección: Jesse Peretz

Guion: Eugenia Peretz, Jim Taylor y Tamara Jenkins, a partir de la novela homónima de Nick Hornby

Intérpretes: Rose Byrne, Chris O´Dowd, Ethan Hawke

Música: Nathan Larson

Fotografía: Remi Adefarasin

Duración: 97 min.

Reino Unido, Estados Unidos, 2018

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