¡Qué felicidad! De nuevo estamos de premio

Permítanme contarles una pequeña intimidad: Anoche, muy entusiasmada y feliz de la vida, me dirigía al recital que mi banda favorita, los irlandeses Snow Patrol, daba en Buenos Aires (A propósito, si no la conocen aún, les sugiero que la agreguen a la lista de música para escuchar y conocer porque no los desilusionará; tienen excelentes letras, combinadas con una variedad de estilos musicales - dentro del pop e indie, claro - y una naturalidad que siempre resulta refrescante). Llevaba meses tachando en el calendario para que llegara la gran cita. Pues bien, en eso estaba yo cuando suena mi teléfono celular (con un ringtone de Snow Patrol; claro, no podía ser de otra manera) para avisarme que había recibido mail y, cuando chequeo para saber de qué se trataba (es que la curiosidad no mató sólo al gato), ahí estaba Carmen de Cocinando a mi manera para contarme que me había elegido para compartir conmigo otro premio. Podrán imaginarse que si mi día ya venía más que bien ubicado en mi ránking personal de "fechas para el recuerdo", después de eso, ascendió abruptamente unos escalones en la tabla de popularidad.Es que los premios sirven para darnos empujoncitos: para seguir creciendo, mejorando y perfeccionándonos, para continuar queriendo dar lo mejor de nosotros mismos y para seguir en camino cuando estamos cansados o desmotivados. Los premios no nos cambian la vida, pero nos ayudan a seguir entusiasmándonos con lo que nos apasiona y trabajando con más alegría. Por todo eso, muchas gracias Cocinando a mi manera por honrarme con un nuevo premio. 

Y como soy relativamente nueva en el mundo de los blogs (¡y ni les cuento en esto de recibir premios por ellos!), por ahora, me quedo a la espera de nuevas instrucciones de Carmen para continuar compartiendo el premio con otros blogs porque por allí leí que tendríamos que responder algunas preguntas que nos realiza quien nos otorga el premio y tendríamos que elegir nuevos ganadores... En fin, aquí me quedo con gesto de haber ganado el Oscar y pose para la foto de los paparazzi (es que a mí no me agarran con premio y despeinada. Ah, noooo) lista para hacer lo que se me indique.
Eso sí, antes de despedirme por hoy, les agradezco a todos y cada uno de ustedes: los que leen mis recetas, los que me dejan comentarios o me realizan sugerencias, los que me siguen o se pasan de vez en cuando por aquí para ver qué preparé de nuevo porque son también quienes me impulsan a seguir compartiendo mis recetas, anécdotas y trastornos obsesivo-compulsivos (Jajajaja) en este blog. Gracias a ustedes por creer en mi cocina y por alentarme a seguir esforzándome como cocinera y blogger.
¡Hasta dentro de unos días! Y disfruten de la vida...