“…¿qué hace El Juli por el toro? Sabemos que apoya a chavales que quieren ser toreros, que tiene una fundación, que promociona la afición con los más jóvenes… Pero ¿y el toro? ¿Cómo ayuda El Juli al toro de lidia? La única respuesta que se nos ocurre pasa por Pamplona y por Valencia. Eso no es ayudar al toro de lidia, ni a la tauromaquia. No obstante, él sigue viendo sus faenas como encomiables, arremete contra la crítica si un día el público se pone en su contra, vive convencido de que el futuro del toreo depende de él, le preocupa el devenir de su profesión y no se olvida del toro, lo degrada más cada día y defiende a ultranza el toro que torean las figuras. Ser torero nunca ha sido ser enemigo del toro. Cuidado con eso porque es imprescindible tenerlo en cuenta y más en los tiempos que corren.”