¿Qué parte de la Radiología es la Radiología intervencionista?

Radiología intervencionista

¿Te tienen que realizar una operación de radiología intervencionista?

Ahora puedes conocer qué es y los tipos de operaciones que incluye.

La radiología intervencionista es una parte de la radiología en la cual las técnicas de imagen son mínimamente invasivas. Esta técnica se está utilizando cada vez más en cuanto al diagnóstico de enfermedades, siendo una alternativa a la cirugía en muchas condiciones médicas. Lo que se pretende con esta técnica es tratar las patologías en forma de mínima invasión, a través de catéteres guiados con imágenes radiológicas.

¿Qué tipos de procedimientos u operaciones están incluidas?

A continuación te detallamos algunas de las operaciones que están dentro de la radiología intervencionista.

Angiografía: es un examen con rayos X de la zona de las arterias y venas. Esto se practica para ver los posibles estrechamientos de los vasos sanguíneos, a través de un catéter con contraste.

Colescistotomía: se trata de un procedimiento donde se coloca un tubo en la vesícula biliar. Con este tupo se remueven la bilis que están infectadas en aquellos pacientes con colecistitis y  que no estén en condiciones de someterse a una intervención quirúrgica.

Embolización: Con esta intervención se bloquean los vasos arteriales que estén mal para parar el sangrado.

Biopsia: la extracción de una parte de tejido para realizar un examen patológico de la zona del cuerpo que indique el médico.

Drenajes: la inserción de los drenajes consiste en la colocación de tubos para drenar fluidos. Se pueden colocar en cualquier parte del cuerpo.

Algunos otros tratamientos incluidos en la radiología intervencionista son la trombolisis, los filtros IVC, tubo de gastrostomía, angioplastia con balón o la quimioembolización.

¿Qué beneficios se obtiene al realizarla?

Los beneficios que implica la realización de la radiología intervencionista son:

No se aplica la anestesia general.

Evidentemente, estos procesos son menos dolorosos.

Al ser menos invasivas, se reducen los efectos colaterales y complicaciones.

Son menos costosos que las cirugías normales.

El paciente se recupera más rápidamente que con una cirugía normal.

Las enfermedades que se pueden tratar son:

Hemorragias internas, coágulos de sangre, aneurismas, malformaciones arteriovenosas, algunos tipos de cáncer, hipertensión, obstrucción del tracto urinario, entre otras.

Artículo redactado por el Staff de SmartSalus.com