Pero, claro, cuando hemos decidido que no queremos gastarnos el dinero (o, al menos, no mucho) en un mero regalo material, ¿qué hacemos? ¿Qué opciones existen? No es necesario agotar tu sueldo para hacer feliz a otra persona, siempre y cuando seas creativo, original y detallista.
Como os dije en el post anterior, este año no voy a comprar "nada" porque lo voy a hacer yo (matizo: tengo que comprar los materiales, pero ya me entendéis). En esa entrada compartí algunos regalos para que vosotros pudierais coger ideas y, esta vez, quiero ayudar a aquellos que, como yo, han decidido abandonar el consumismo de San Valentín y se han preguntado "¿qué narices hago?".
PD: pongo esto porque estamos en la etapa San Valentín, pero este post se puede adaptar a cualquier época de regalos.
1- Saca tu artista interior.
Escribir un poema, componer una canción, pintar un retrato... Hay un artista en ti, y lo sabes. Y, de hecho, puede que lo seas. Aprovecha tu don para dedicarle algo personal a esa persona. Las cosas se acaban estropeando, pero esto, jamás.
2- DIY.
Abre Pinterest, coge ideas y ponte manos a la obra. Hay muchísimas cosas que se pueden hacer y no tienen por qué quedar mal. Elige algo que esté dentro de tus capacidades y posibilidades. No solo harás algo genial sino que pasarás un buen rato.
Como sugerencia, una de las cosas DIY que están teniendo mucho éxito ahora son los álbumes de scrapbooking. Y hoy mismo encontré esta manera de personalizar una taza.
3- Las manos a la masa.
Haz una comida casera o un postre delicioso para regalar. Pon a prueba todos tus conocimientos sobre Masterchef y haz que se chupe los dedos. A TODOS se nos conquista por el estómago, eso es un hecho.
PD: si hasta los macarrones se te queman, no te preocupes, puedes comprar la comida, no te tacharemos de consumista por eso. También valen las chocolatinas y las chuches.
4- Escribe una carta sincera.
Estamos hartos de escribirnos menajes por WhatsApp, Facebook y otras mil redes sociales, pero, ¿hace cuánto que no escribes algo sincero de verdad con tu puño y letra? Párate a reflexionar sobre qué significa esa persona para ti, rememora cómo os conocisteis y confiesa todas las cosas que te gustaría hacer a su lado. ¡Seguro que hasta le saca alguna lagrimita! Y no te olvides de añadir dibujitos, pegatinas o fotos. Lo hará aún más especial.
5- Regala algo que ya tengas y que signifique mucho para ti.
El primer disco que compraste con tus ahorros, un peluche de la infancia, tu pulsera de la suerte... Hay muchísimas cosas que significan mucho para nosotros, aunque tengamos tiradas por la casa y ya ni siquiera las usemos. Los objetos no son más que objetos, pero tiene un gran simbolismo el hecho de que seas capaz de separarte de algo importante para que otra persona lo tenga por ti.
6- Regala experiencias.
Como acabo de mencionar, los objetos no son más que eso. Es lo que vivimos lo que se queda en nuestros recuerdos y nuestros corazones. En vez de regalar un reloj, regala una excursión a la montaña, una tarde de cine, una noche de hotel... No es necesario comprar una de esas cajas de Wonderbox.
7- Graba un cd casero con vuestras canciones.
Puede que esto sea "so yesterday", pero es que regalar una playlist queda DEMASIADO cutre. Yo creo que los discos físicos aún hacen ilusión y, además, se pueden envolver y personalizar. Si quieres ir más allá, siempre puedes añadir notas de voz grabadas por ti con mensajes especiales.
*Súper idea de Pinterest: pendrive como si fuera una vieja cinta de cassette
8- Un vídeo.
Pídeles a unos cuantos amigos que te ayuden y grabad un vídeo simpático y emotivo. Pueden ser declaraciones, cosas graciosas, podéis poneros a cantar o simplemente hacer el bobo. A la persona en cuestión le va a hacer ilusión solo con ver lo mucho que os habéis esforzado.
9- Y, si aún así quieres comprar... compra de segunda mano.
Utiliza una de las tantas aplicaciones (o tiendas físicas, aunque eso depende de dónde vivas) para comprar a bajo coste algo que esa persona siempre ha querido. ¡Seguro que no le importa que no sea nuevo!