Que viene el Tormenta...

En cuestión de minutos el cielo se pone negro de repente empiezan a saltar chispas y el inconfundible ruido de la batalla nos indica que la tormenta esta apunto de empezar. Y mientras el científico de turno, o sea yo, intenta llegar a casa lo menos mojado posible, aunque no nos engañemos a todos nos gusta la sensación de notar la lluvia cayendo. Y justo en ese momento el rayo hace que se me encienda la bombilla y el tema del blog ya lo tengo.

Rayo

Como todos sabemos un rayo esta compuesto por una descarga eléctrica potentísima (relámpago) y un característico ruido (trueno).
Las nubes están formadas por pequeñas moléculas de agua en forma de hielo, acordaros que la altura que están las nubes tenemos temperaturas de -15ºC -20ºC. Resulta que las moléculas de agua provenientes de la evaporación en la tierra chocan con estos pequeños fragmentos de hielo haciendo que se carguen eléctricamente. La combinación entre el hielo y el agua ascendente crea trozos de hielo más grandes cargados negativamente que se quedan en la parte baja de la nube y por tanto la parte superior de la nube queda cargada positivamente.

Separación de cargas en una nube

Allá por donde pasa la nube va cargando el suelo de manera positiva. El aire es un aislante eléctrico, pero conforme se va aumentando la tensión y la distancia con la tierra se hace menor el aire deja de ser aislante eléctrico y se produce el arco eléctrico, el famoso relámpago para anular las cargas generadas.

Esquema generación de rayo

Entonces de donde viene el trueno? La energía liberada por el rayo calienta el aire por donde pasa produciéndose una expansión y generando una onda de choque que da como resultado la onda sonora que todos escuchamos, el trueno.
Para protegeros de los relámpagos no os pongáis debajo de árboles o estructuras altas y puntiagudas porque estas estructuras tienen más posibilidad de recibir un rayo.Lo mejor si tenéis un coche cerca es meteros dentro, el vehiculo actúa de jaula de faraday. Si no es posible es lo mejor es estiraros en el suelo y alejar de vosotros objetos metálicos que podáis llevar encima.