Esta obra da una visión dura, sin contemplaciones, sobre los sentimientos y las motivaciones humanas, la memoria, los riesgos y el rencor. Es una mirada sobria, sin grandes efectos, dejando que los actores, muy bien dirigidos, den lo mejor de sí. Destaca entre ellos Luís Tosar, que encarna con eficacia un personaje poderoso y con el que es fácil identificarse, lleno de matices y capaz de enternecernos y dejarnos helados con la misma fuerza. Con esos ingredientes y un impecable quion, la historia progresa implacable hacia un final lógico y coherente, que nos deja con el corazón en un puño. Es una película áspera, dura y, desde luego, muy recomendable. Puntuación @cineEnCines: 8/10