En los tiempos que corren, los negocios online tienen uno de sus pilares en los Blogs, en los Contenidos de calidad y en la información variada y constante hacia sus clientes. Están por encima de muchas campañas publicitarias basadas en clicks y los usuarios valoran muy positivamente todos los Portales que dispongan de uno. Ahora bien, no se trata de tener un Blog y ya está, o publicar de vez en cuando. Hay que seguir una serie de reglas que ya hemos explicado anteriormente, pero hoy nos vamos a centrar en lo que NO HAY QUE HACER cuando se tiene un Blog.
Desconocer tu Lugar
Aunque parezca una perogrullada no todos los dueños de Blogs saben qué temas escoger o cuáles son de interés para los lectores. Los pequeños negocios locales tienen serias dificultades para conectar con sus potenciales clientes. Es necesario escribir con eficacia para que nos encuentren en las búsquedas locales como primera norma y para ello necesitamos conocer a qué clientes nos dirigimos y cuáles son sus necesidades.
Para entendernos, si yo tengo un Blog que trata sobre cocina, debería preocuparme si los mensajes que recibo son de otro tema distinto o simplemente enlaces cebo o temas de actualidad que no tienen relación alguna. Es claro que eso lo sabremos con el tiempo, pero si observamos que ese camino es habitual, hemos de poner remedio.
Diseño lamentable
No estamos ya en los años 90. El diseño ha avanzado a pasos agigantados y el gusto de los usuarios mucho más. Se acabaron los tiempos en que se pedía a un adolescente o al hijo de un amigo que nos hiciera la Web de la empresa. Y más hoy, con los CMS´s como punta de lanza, que nos permiten una gestión integral de nuestro contenido, amén de un diseño cuidado, elegante y adaptado a todos los dispositivos.
WordPress es un ejemplo claro de esto, pero hay que distinguir dos caras en este CMS. Por un lado, las enormes posibilidades que ofrece para la creación de un Blog, pero por otro, la pereza que causa en muchos usuarios que deciden que WordPress es su CMS. No es difícil, cuando navegamos por la Red, encontrar cientos de Blogs con diseños pre-formateados que mantienen incluso las imágenes originales de la plantilla. Cuidado con esto. No se trata solo de instalar un Theme y olvidarnos, no. Una plantilla no es más que una guía, pero hemos de dotar a nuestro diseño de las características y matices que distinguen a nuestro negocio. Si se trata de un Blog personal, esforzarnos en que se diferencie del resto.
Contenido desordenado
Otro mal endémico que, aún hoy, podemos encontrar por la Web. Desde texto muy pequeño sobre fondos oscuros y poco legibles, hasta la intención en los textos de estar más preocupado de colocar Palabras Clave que de dotar al contenido de cierta coherencia. También nos encontramos Blogs sin barras laterales que aporten más información, exceso de banners sin sentido, artículos relacionados que no se incluyen, autores, fechas, etiquetas y un largo etcétera que hacen que el Blog sea un caos. Esto es un problema que, aunque los Buscadores no lo penalicen, sí lo hacen los usuarios.
Publicación inconsistente
Sí, hay pequeños negocios que tienen un Blog y su jefe, que no es un apasionado de Internet, solo se acuerda de que dispone de uno cuando oye campanas, es decir, cada dos o tres meses. Entonces le dice a un subordinado que publique algo, lo que sea, sin muchas más pistas. Entonces, dicho subordinado escribe un pequeño artículo que poco o nada tiene que ver con el negocio. En definitiva, para hacer eso, mejor no tener un Blog, pero si lo tienes, es el camino más corto para que nadie te lea.
El usuario medio se da cuenta cuando un Blog está activo y cuando no, cuando está cuidado y cuando no. Si quieres hacerte con un número de seguidores más o menos importante, has de saber que frecuentarán tu Web a menudo a la espera de nuevas publicaciones. Si no les das de comer algo, lo mismo que han venido, se irán, no lo dudes.
Blog mal escrito
Se nota demasiado cuando un artículo está mal escrito o lo ha hecho alguien poco profesional. Ya no solo las faltas de ortografía -que por otra parte no deberían existir o ser meras anécdotas-, sino cuando escribimos muy, muy rápido y cometemos errores tipográficos a los cuales no dedicamos el tiempo necesario para repasar antes de publicar. Un ejemplo, cuando un servidor escribe un artículo, lo lee dos veces antes y en un 90% de veces, siempre encuentra un error.
Luego está el formato de los párrafos. Ten en cuenta que te leen desde la pantalla o un dispositivo aún más pequeño. No utilices texto minúsuculo y de difícil visualización, además de una adecuada separación entre líneas. Utiliza texto en negrita para enfatizar, cursivas, tildes, mayúsculas cuando corresponda, etcétera. Un texto bien escrito siempre será bien valorado.