Está claro que lo más común para vestir una pared vacía son los cuadros. Hemos visto cantidad de composiciones hechas con marcos de diferentes tamaños o colores, pero si queremos ser un poco más originales también podemos dar cabida a ese grupo de platos, cestos o incluso bastidores que tenemos guardados. Los hemos ido coleccionando por el simple hecho de que nos gustan y nos apetece lucirlos en casa pero no sabemos como. Pues aquí podéis ver lo bien que puede quedar un collage hecho con tus tesoros. Te atreves?