Llevo un año de retraso con la reseña de Rabia por el Mundo pero, como pudísteis comprobar con la reseña de Momia: La Resurrección, el tiempo en Fragmentos de Rol no es un factor tan determinante. Lo cierto es que me estaba ganando la pereza, más aún cuando éste suplemento, aunque entretenido y con información de interés, no ha terminado de colmar mi expectativa. Pero hace poco tuve una idea que me ha servido para acicatear un poco las ganas que faltaban: hacer una comparativa en lugar de escribir una reseña. ¿Y con qué lo voy a comparar? Pues con los suplementos geográficos que lo precedieron en las ediciones anteriores.
El actual Rabia por el Mundo hereda el nombre que se le dio a tres recopilatorios de suplementos regionales de Hombre Lobo. Estos recopilatorios eran, básicamente, reimpresiones cada uno de ellos de dos suplementos que ya estaban descatalogados en el momento de su publicación. En concreto, el volumen 1 reimprimía el antaño imprescindible Túmulos: Lugares de poder y Rabia en Rusia; el volumen 2 contenía Rabia en Australia y Alianza oscura: Vancouver; y por último el volumen 3 reimprimía los clásicos Rabia en Nueva York y Rabia en el Amazonas, a la sazón, probablemente, los dos suplementos regionales más usados y demandados de las ediciones anteriores.
No obstante, el Rabia por el Mundo de la edición 20 aniversario no es una compilación de suplementos antiguos, ni tampoco una recopilación de material escogido de ediciones anteriores. Contiene información novedosa y actualizada acerca de múltiples lugares del orbe, y sobre los esfuerzos que los Garou y las otras Razas Cambiantes llevan a cabo en dichas regiones, nuevos túmulos, tótems, Dones, fetiches... Es por ello que considero que, en realidad, el que debe considerarse su predecesor intencional es Un Mundo de Rabia, suplemento publicado por La Factoría en 2002 que tiene por objeto abarcar todo el orbe en cuanto a lo que el mundo de Hombre Lobo compete.
Para esta comparativa sin pretensiones contamos con la edición premium de Rabia por el Mundo y la única (antes no cabían lujos en el rol) de Un Mundo de Rabia, las cuales podéis ver encabezando estas líneas. ¿Comenzamos comparando números?
Un Mundo de Rabia contiene 134 páginas estructuradas en cinco capítulos. Rabia por el Mundo consta de 123 páginas estructuradas en una introducción, cuatro capítulos y un epílogo.
Los cinco capítulos de Un Mundo de Rabia se corresponden con las cinco demarcaciones geográficas en las que el libro divide nuestro mundo: Las Américas, Eúrasia (sic), Africa (sic) y Oriente Medio, India y Asia, y por último Australia y los Mares del Sur.
Dentro de cada uno de los capítulos se va desgranando la información por regiones más pequeñas, zonas o países. Esta información incluye detalles históricos, geográficos y políticos breves pero suficientes para hacerse una composición de lugar, así como introduce la información relativa a la actividad cambiaformas en la zona: no sólo acerca de los Garou - aunque si principalmente - sino también acerca de las demás Razas Cambiantes.
En el texto de cada zona se mencionan los nombres de los clanes y túmulos más poderosos o afamados, y de los Garou y algunos otros cambiaformas conocidos por sus hazañas en esa parte del mundo. Resulta curioso comprobar que no se detallan los datos de prácticamente ningún túmulo (Nivel, Celosía...) con la salvedad de los túmulos y clanes rusos: en el libro se dedican tres páginas a detallar diecinueve de ellos, siendo cuatro Pozos del Wyrm.
Pero la mejor información que proporciona el libro es la metatrama. En cada región se narran sucesos de interés para los Garou, batallas, misiones de manadas o de hombres lobo solitarios que proporcionan una ingente cantidad de ganchos argumentales para desarrollar a partir de ellos, o con su inspiración, un montón de campañas interesantes. Las acciones de Pentex en Canadá, los remanentes del Telón de Sombras en Rusia, la guerra civil de Diente Negro en África, los sucesos de la Semana de las Pesadillas y el acercamiento de los cambiaformas indúes a las Cortes de las Bestias orientales, los fantasmas de los Bunyip en Australia y el terror oculto bajo la Antartida... son todas atractivas y vastas metatramas, pero también aparecen muchos otros ganchos más modestos - algunos igual de interesantes o más - de los que pueden surgir buenas historias.
Obviamente, mucha de la información geopolítica está absolutamente desfasada, puesto que hablamos de un suplemento publicado en el año 2000. La edición en castellano, que es de 2002, ya incluye una nota advirtiendo esto, junto con la que el equipo de White Wolf puso inicialmente pidiendo comprensión por no haber representado todos y cada uno de los países existentes y por los cambios que existen respecto del mundo real para reflejar la faceta oscura del Mundo de Tinieblas. Leer este libro a día de hoy es un poco como consultar un globo terráqueo o una enciclopedia del siglo pasado en ese sentido. No obstante, la mayor parte de la información y del trasfondo de juego siguen pudiendo ser usados con un nulo o escaso trabajo de actualización.
El estilo del texto no es narrativo. De hecho, a diferencia de la mayoría de suplementos de Hombre Lobo por aquella época, ni siquiera incluye la acostumbrada narración inicial de "Leyendas de los Garou" para irnos metiendo en ambiente, sino que entra directamente al primer capítulo geográfico.
Vayamos ahora con Rabia por el Mundo. Este suplemento del 20 aniversario establece la división de sus capítulos no por demarcaciones geográficas, sino por zonas de influencia espiritual de la Triada: El Kaos, la Tejedora, y el Wyrm. Pero antes de meterse en harina con el tema principal del suplemento, Rabia por el Mundo nos ofrece, en su primer capítulo, una actualización sobre el funcionamiento interno de los clanes Garou y acerca de los cargos y los beneficios que aportan a quien los ostenta. Esta información representa el principal aporte de Rabia por el Mundo en cuanto a actualización de reglas del juego, pintando la consecución de un cargo para un personaje jugador algo más atractivo, al obtener ciertas recompensas más allá del honor nominal (y el trabajo añadido) de ostentarlo. Se detallan todos los cargos ya existentes mas dos o tres de nueva creación.
Cuando pasa a desgranar la información de los siguientes capítulos, Rabia por el Mundo adopta el formato narrativo. Cada uno de ellos es, en realidad, un relato narrado por cuatro Garou de diferentes tribus, auspicios y, si, también razas, quienes nos trasladan sus vivencias a lo largo y ancho de un mundo visto a través de sus ojos.
El segundo capítulo (La Tejedora) nos presenta a Huellas-livianas, un Galliard de los Contemplaestrellas que se propone explicar a un joven cachorro qué es la ciudad. A lo largo de su historia va pintando el paisaje de las ciudades de Pittsburgh, Shanghai, El Cairo, Seattle y Londres, y de los desafíos que cada una de esas ciudades ha planteado y sigue planteando ahora mismo a sus pobladores Garou. Este capítulo resulta interesante sobretodo para leer, pero de todos es el que plantea ubicaciones que me parecen menos atrayentes.
El tercer capítulo (El Kaos), el lupus Lobo del Lago Lunar narra sus esfuerzos por seguir los pasos de la Parentela Lupus por Minnesota, el Parque de Yellowstone, la Península Ibérica (¡oe!), el Outback australiano, Etiopía, Asia Central y la zona de exclusión de Chernóbil. De los tres capítulos principales, me resulta el más atractivo, tanto por los ganchos argumentales propuestos como por las propias localizaciones. Y no, no es porque me tire la patria, malpensados. De hecho, la parte ibérica es de las más breves.
En el capítulo cuarto encontraremos las experiencias de una Garou de la Camada de Fenris dando caza a los siervos del Wyrm y desenmascarando su corrupción en varios lugares del mundo, concretamente en el Amazonas, Louisiana y Nueva York (EEUU), la Presa de las Tres Gargantas en China, Norilsk en Rusia y Francistown en Botswana. Aquí tenéis una de las localizaciones más perturbadoras y atrayentes del libro, la ciudad cerrada de Norilsk.
Al final de cada capítulo se ofrece la ficha completa del narrador del mismo, y algunos fetiches, dones o tótems mencionados durante la narración. Algunos, como Estruendoso Bum Bum (antaño conocido como Clasing Boom Boom) y Poderoso Dólar son actualizaciones de espíritus aparecidos en las ediciones anteriores, mientras que otros como Una Voz son patrones recién llegados.
Conclusión: Un Mundo de Rabia sigue siendo, en mi opinión, un suplemento más útil e interesante para narradores que Rabia por el Mundo, a despecho de su antigüedad. Aunque el segundo título también aporta un buen número de ganchos argumentales e ideas, el primero logra con mayor solvencia hacer honor a la palabra "mundo" en su título, al cubrir un mayor campo con la información que aporta. Lo que aparece en Rabia por el Mundo no deja de ser un puñado, si bien amplio, de localizaciones escogidas. A su favor, Rabia por el Mundo tiene que está escrito de una forma más amena de leer, por haber elegido el formato de narración por parte de un personaje, y aporta datos y reglas nuevas, en especial en lo referente a los cargos de clan. En este aspecto, es también una actualización del suplemento Guardianes de los Túmulos, y para mi uno de sus principales puntos a favor, puesto que la información que aparece al respecto en el básico no es suficiente para reflejar bien cómo es ostentar un cargo en un clan. No obstante, y aunque no sea por goleada, creo que en este caso gana lo viejo. Pero ésta es una opinión de rolero viejo xD