Al parecer, el porcentaje de los casos de reacciones alérgicas a los alimentos en la escuela es muy elevado, según AEPNAA (Asociación Española de Alérgicos a Alimentos y Látex) las cifras muestran que hasta un 20% se producen en los colegios, lo que obliga a que el profesorado y el personal de los colegios cuenten con la formación oportuna para saber qué hacer dependiendo de cada caso. Parece que poco a poco los profesores deben convertirse en “especialistas médicos”, alergias alimentarias, formación sobre la diabetes tipo 1 infantil, reconocer los síntomas del asma infantil, etc.
Es evidente que al ser los profesores personas adultas que pasan mucho tiempo con nuestros hijos, se intente que además de velar por su educación, velen por su salud, nosotros recibimos muy bien este tipo de iniciativas y parece ser que el profesorado también. La realidad es que recibir formación de este tipo es necesario a fin de evitar accidentes y desgracias, saber enfrentarse a los primeros síntomas de las reacciones alérgicas a los alimentos en la escuela a tiempo, es fundamental, se puede salvar la vida de un niño.
AEPNAA “denuncia” que tutores, responsables de los comedores escolares o los directores de los centros no cuenten con una mínima información que les permita actuar ante los síntomas de las alergias alimentarias u otras cuestiones asociadas a los niños alérgicos. Como decíamos, un 20% de casos obliga a tomar medidas específicas. Este año un acuerdo interterritorial entre todas las consejerías autonómicas permitirá adaptar los menús escolares a los niños alérgicos, pero es sólo un paso, y se deben dar algunos más.
Nos sorprenden las declaraciones de Nuria Bellido, vicepresidente de la mencionada asociación, indica que aunque la dieta ya esté legislada, algunos centros escolares ponen trabas para que algunos niños no se queden en el comedor escolar, parece que quieren evitar problemas a toda costa no admitiendo a los niños susceptibles a sufrir reacciones alérgicas a los alimentos en la escuela, este tipo de actuaciones deberían ser denunciadas y más cuando ya existe la correspondiente legislación.
Al parecer, sólo existen dos consejerías que disponen de un protocolo de actuación ante una reacción alérgica en el colegio, el resto de consejerías del territorio español todavía no han puesto en marcha protocolos para proteger la salud infantil. Parece evidente que hay mucho por hacer, los niños necesitan una atención más personalizada y no basta sólo con la educación, con la información oportuna ofrecida al profesorado, los niños alérgicos podrían llevar una vida normal sin complicaciones.
Será interesante para el profesorado conocer el protocolo de actuación ante una reacción alérgica en la escuela desarrollado por AEPNAA y la SEICAP (Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica de alergología), protocolo al que se puede acceder a través de este enlace.
A través de Europa Press podemos saber que se realizan cursos gratuitos en las escuelas que cuentan con el aval del Ministerio de Educación, la idea es formar a los profesores para que sepan actuar ante determinados casos de alergias infantiles, algunos cursos son muy bien recibidos y habían sido solicitados por los profesores, algo que demuestra el interés que tienen por mejorar la calidad de vida de los niños alérgicos en las escuelas.
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Reacciones alérgicas a los alimentos en la escuela