Receta fácil de calabacín adobado al horno

Una guarnición insuperable, bueno mejor unos snack o aperitivos muy sabrosos, aunque también los puedo poner de primer plato, eso es lo que pensarás cuando veas esta receta fácil y rápida para elaborar unas rodajas de calabacín adobadas al horno, un forma diferente de preparar esta verdura tan versátil y sana.
Yo iba a utilizar estas rodajas para acompañar un plato de carne, ya sabes para no tener que poner las patatas fritas de siempre, pero en cuanto salieron del horno, no hubo forma de que pararán de comerlos, por lo que opte por sacarlos para picar antes de cenar, aunque te digo que yo no me quede atrás ya que están muy buenos. Ya sabes que en cuanto al adobo lo puedes adaptar a tus gustos, utilizando cualquier tipo de hierbas aromáticas que te gusten, como romero, tomillo, o un poco de algún curry, es cuestión de ir probando hasta que encuentres la combinación que mas te guste, si quieres darle un toque picante le puedes añadir un poco de paprika o pimentón picante. El adobo que yo te indico es muy simple pero con un resultado que suele gustar a todos.

Bueno pues con esta elaboración ya tienes otra idea para preparar el calabacín, así podrás variar y disfrutar de esta gran verdura. Si tienes cualquier tipo de duda sobre los ingredientes o preparación tan solo tienes que dejarme un comentario.

Tiempo:

30 minutos

Valor Calórico:

bajo

Dificultad:

baja

Cantidad:

4 personas

Ingredientes

• 1 Calabacín
• 1 Cucharada de pimentón rojo
• 1 Cucharada de orégano
• 3 Dientes de ajo
• Perejil picado
• 35 ml de vino blanco
• Sal y pimienta al gusto
• 4 Cucharadas de aceite de oliva

Preparación

• Lava y corta el calabacín en rodajas finas.
• Pela y pica los ajos.
• Precalienta el horno a 200º centígrados unos minutos antes de hornear.

Elaboración

Echa las rodajas de calabacín en un bol.
Vierte el vino blanco.
Vierte también el aceite de oliva.
Ahora añade las especias.
Echa sal y pimienta molida al gusto.
Echa también el orégano y el pimentón rojo.
Por último añade el perejil y los ajos picados.
Con un par de paletas remueve bien las rodajas de calabacín para que se adoben.
Cuando las tengas bien adobadas ya las puedes hornear.
Coloca sobre una bandeja plana de horno papel vegetal.
Si no tienes puedes untarla con un poco de aceite.
Coloca las rodajas de calabacín en la bandeja del horno.
Procura que queden bien esparcidas, que no estén amontonadas.
Si queda un poco de caldo en el bol lo echas por encima de las rodajas.
Introduce la bandeja en el horno precalentado a 200º.
Las dejas hornear durante 20 minutos aproximadamente.
Saca la bandeja del horno.
Ya las tienes listas para comer.

Consejo

• Puedes añadir las especias que prefieras.
• Si te gusta el punto picante echa la mitad de pimentón o paprika picante.
• Si cortas las rodajas gruesas tardarán mas tiempo en hornearse.