Para comenzar de manera oficial la temporada de recetas navideñas en Bouquet Garni Recetas (¡Cómo se ha pasado el tiempo volando! Pero, si parece que fue ayer cuando nos deseábamos lo mejor para el año que comenzaba y ya, en pocas semanas, nos estaremos despidiendo de otro año más...), les propongo esta Fruit-cake (Torta de frutas) deliciosa que lleva su tiempito de maceración para dejarla lo más sabrosa posible. Por eso mismo, esta es la receta con la que abro (así, si les gusta mi propuesta, pueden prepararla lo antes posible y llegar a tiempo para las celebraciones) esta particular época del año en que vamos eligiendo los menús más apropiados para nuestras mesas, escogiendo las recetas que más nos atraen, las que siempre quisimos realizar, aquellas que nos unen con sabores y recuerdos a nuestras madres y abuelas, las de siempre, las que sabemos que nos dejan como reinas indiscutidas de la cocina, las que nos representan algún desafío, las que regalaremos o llevaremos a las reuniones y fiestas, o aquellas que llegan desde otras partes del mundo y nos seducen por sus ingredientes, sus curiosidades o su presentación.
Esta Fruit-cake es muy fácil de realizar y como detalle extra ofrece una masa libre de gluten; pero, no por eso, libre de todo el sabor y aroma que le imprimen las especias, el brandy y las frutas ;)
Con esta receta participo en el Reto de "Christmas Time" de la comunidad Cocineros del Mundo en G+
Aquí les dejo el listado de ingredientes, así nos ponemos ahora mismo a cocinar
Antes que nada, deberás colocar en un bol 120 gramos de pasas rubias (o de Corinto), 120 gramos de cerezas en almíbar (o al Marraschino) cortadas en mitades, 90 gramos de nueces partidas de manera grosera y 100 gramos de peras deshidratadas cortadas en trocitos junto con 160 cc. de brandy (o Coñac, Whisky, aguardiente...). Cubrí con papel film y dejá macerar en la heladera/refrigerador durante toda una noche.Al día siguiente, en un bol amplio, cremá con batidora eléctrica 120 gramos de manteca pomada (a temperatura ambiente) con 100 gramos de azúcar integral/mascabo (puede ser azúcar blanca, en su lugar) hasta obtener una crema bastante homogénea y de color más o menos claro (si utilizás azúcar común, esta diferencia de color es bien evidente).
Entonces, incorporá 2 huevos (pastoriles/de campo/ecológicos), de a uno por vez, sin agregar el próximo hasta que no logres integrar muy bien el anterior.
Luego, añadí, ayudándote con una espátula, 200 gramos de almidón/fécula de maíz mezclados con 1 cucharada de polvo para hornear/levadura química, 40 gramos de almendras molidas y 1 cucharada de mezcla de especias (cardamomo, canela, jengibre, clavo de olor y nuez moscada) hasta lograr una mezcla suave.
Por último, incorporá las frutas que estuvieron macerándose desde el día anterior, bien escurridas. Disponé la mezcla obtenida dentro de un molde (puede ser de 15-20 centímetros de diámetro, dependiendo si deseás una torta más o menos alta), cubierto con papel manteca/para horno/vegetal en su base y paredes. Emparejá ligeramente la superficie y disponé 9 nueces enteras y 8 cerezas en almíbar enteras a modo de decoración, acompañando el patrón circular del molde.
Cociná en horno precalentado a 140°C por 90 minutos o hasta que supere la prueba del palillo.
Dejala enfriar en el molde por unas 2 horas antes de desmoldarla. Cuando llegue el momento, realizá esta tarea con cierto cuidado, ya que las masas formadas con almidón de maíz tienden a desmoronarse/arenarse con cierta facilidad y lo que menos deseamos, a esta altura de las circunstancias, es arruinar nuestra exquisita torta. Para desmoldarla, valete del papel manteca/para horno/vegetal que utilizaste para cubrir el molde de cocción y dejala que termine de enfriarse en una rejilla para tales fines.
Algunas recomendaciones y observaciones finales: Esta Fruit-cake deberá descansar, al menos, 24 horas antes de ser consumida. Y si ese tiempo les parece exagerado, debo aclararles que la receta original suele prepararse - en el Reino Unido, en donde tiene mayor difusión esta exquisitez navideña - para el mes de septiembre, con el fin de que llegue bien macerada (con todos los aportes del brandy, las especias y las frutas mismas) a la Nochebuena. De modo que, si lo miramos desde esa perspectiva, unas 24 horas de contenernos para probarla no es nada ;)
Cuanto más tiempo puedan dejarla reposando antes de engullirla, tomará más sabor y resultará más deliciosa. Se conservará por 6-8 semanas en un recipiente hermético y, preferentemente, en la heladera/refrigerador para que la fruta no fermente (en especial, en esta parte del mundo - el hemisferio sur - en donde para Navidad solemos sufrir el agobio de las altas temperaturas). Para consumirla, deberán dejarla a temperatura ambiente por una o dos horas (si se encuentran en invierno y las temperaturas son bajas podrá permanecer más tiempo sin refrigerarse).
Si lo desean, pueden cubrirla con azúcar impalpable/glas, glaseado de naranja o limón, o hilos de chocolate derretido. A nosotros nos gusta así, a cara lavada, porque es una torta muy liviana en cuanto a la masa, pero bastante pesada en cuanto a su contenido de frutas; además, plena de sabor, no muy dulce, de modo que no empalaga sino que invita a seguir comiendo. De hecho, les cuento un secreto: En casa, cuando la preparo - y no estamos en época navideña - no sobrevive a las 24 horas porque gusta muchísimo y una porción le sigue a la otra hasta que desaparece toda y no quedan ni las migas...
Si así lo prefieren, pueden reemplazar el almidón/fécula de maíz por harina común o por mezcla de harinas sin gluten (que, por lo general, contiene harina de arroz, de mandioca/yuca y fécula de maíz).
Para cortar correctamente la torta sin romperla ni desmigajarla, lo ideal es utilizar cuchillo serrucho para pan.
Las peras deshidratadas pueden sustituirse por frutillas o arándanos deshidratados, cerezas o cascaritas de naranjas escarchadas, higos secos, ciruelas desecadas... Asimismo, si lo desean, pueden incorporarle a la masa agua de azahar o agua de rosas para perfumarla aún más.
Esta torta, tan típica de la época navideña, tiene sus raíces en la Antigua Roma (en donde se preparaba con piñones, pasas y granadas); pero, fue durante la Edad Media cuando tomó la fisonomía más cercana a la actual, comenzando a elaborarse con miel, especias y frutas en conserva o maceradas.
Como ya les he dicho antes, esta Fruit-cake es una adaptación libre de gluten que resulta exquisita (inspirada en uno de mis libros de pastelería más preciados: Meg Rivers Home Baking por Julian Day), repleta de fruta sabrosa, bien macerada y con mucho perfume, con una masa liviana y muy gustosa. Es ideal para invitar, compartir o regalar como símbolo de prosperidad y afecto.
Ojalá les guste y los tiente lo suficiente como para probarla porque, en verdad, es muy sabrosa.
Aquí les dejo otras recetas navideñas que pueden interesarles...
Christmas Cake. Pan de especias
Me despido hasta el viernes porque les recuerdo que, como ya es costumbre - yde acuerdo con lo que les adelanté la semana pasada - en este blog durante laépoca navideña tenemos doble receta semanal, así podemos tener más opciones a mano para decidir qué preparar en estas fiestas ;)
¡Pásenla muy bien, disfruten junto a sus seres amados y experimenten en la cocina!
Textos y fotografías: ©Bouquet Garni Recetas
Digiscrap: ©Scrapyrus Designs/Miss Lavanda/Studio Flergs