Normalmente cuando hablamos de lechuga, la gente no sale de ensaladas. La lechuga es algo muy parecido a la col, así que si la col se encurte, cuece y saltea... ¿por qué no la lechuga?. De hecho, hace tiempo ya hicimos lechuga encurtida al estilo de Beijing.
De igual manera, cuando hablamos de alubias, la mayoría pensamos en unas fabes, un puchero o algo similar. Bueno, las alubias se pueden tomar frías, en ensaladas por ejemplo.
Partiendo de esta base, vamos a hacer un plato rápido para verano. O para días sin mucho tiempo. Como prefieras ;)
El material usado:
- Recipiente
- Cazuela
- Sartén
Los ingredientes:
- Alubias de carilla (o careta)
- Lechuga iceberg
- Pechuga de pollo
- Salsa Worcestershire (Perrins), salsa de soja o similar
El proceso:
Nosotros usaremos alubias de esas que no vienen en bote ya cocidas, por eso tendremos que dejarlas a remojo desde la noche anterior. Si tú usas de las de bote, este paso te lo ahorras y lo sustituyes por "abrir el bote".
Sean de bote o de las otras, las pasaremos por agua para limpiarlas y refrescarlas un poquito. Si son de bote las dejaremos reservadas y si son de las otras, las coceremos en agua hasta que estén hechas.
La pechuga de pollo la cortaremos en filetitos finos, como si estuviéramos cortando una zanahoria. Los untaremos en aceite y los echaremos a una sartén sin aceite, muy caliente.
La lechuga la cortaremos en juliana, no demasiado larga, para que no sean espaguetis de lechuga. Obviamente la lavaremos y escurriremos para que no nos salpique luego en la sartén.
Cuando el pollo esté prácticamente hecho y tostadito por fuera, echaremos la lechuga. Saltearemos un rato, lo justo para que se ablande un poquito y coja una textura muy curiosa. Finalmente, añadiremos las alubias y removeremos ya con el fuego quitado aprovechando para añadir unas gotas de soja, Worcestershire o sal si no teneis ninguna de las anteriores.
La finalización:
Sacaremos la mezcla de la sartén, lo echaremos en una fuente o plato y meteremos al frigorífico para que se enfríe.
Cuando llegue el momento, se sirve un montoncito en cada plato y a comer :)
Consejos y apuntes finales del chef:
Si sois de esos a los que las alubias os sientan realmente mal, podeis evitar las digestiones difíciles y los gases echando un poco de bicarbonato al agua donde estarán toda la noche. Eso sí, no olvideis limpiarlas luego bien o aquello sabrá a rayos :(