Recicla un mueble con papel de rosas

Tengo la casa decorada con muebles que voy encontrando en contenedores o abandonados en la acera. Hace tiempo encontré un mueble de cocina retro en la calle. El mueble en sí estaba bien pero las puertas estaban arañadas y los pomos estropeados, como el mueble merecía la pena decidí reciclarlo revistiéndolo con papel. En concreto utilicé un papel de Coodonné, el modelo Mary Jane, en negro- tienen en otros colores- Una vez elegido el papel necesité cola, una brocha, tijeras, tiradores paciencia, tiempo, ánimus jocandi y barniz - elegí un barniz para exteriores que siempre dura más y nunca se sabe dónde va a terminar el mueble, un pensamiento muy positivo cuando se carece de jardín, terraza o puente- En Ikea encontré unos tiradores que imitan el estilo retro y que parecían del mueble.

He aquí el hallazgo callejero

Materiales necesarios para emprender el reciclaje

Mi idea era empapelar los frentes de las puertas, cajones y la tapa superior del mueble dejando los cantos vistos porque tenían su aquél. Lo primero que hice fue medir las piezas, recortar el papel e ir pegándolo con cola. No me preocupaba que fuera efecto pegatina y que pudiera levantarse porque pensaba barnizarlo después incluyendo los cantos para que quedara mejor adherido.

Para que quedara bien pegado sin pompas de aire pasé con esmero un rodillo que es una cosa que siempre llevo en el bolso, pero si ustedes no tienen un rodillo pasen un trapo a dos manos en plan “dar cera, pulir cera” de Kárete Kit, asegurando que no quedan arrugas, porque eso de que la arruga es bella valga como consuelo cuando no hay más remedio. Cuando se secó la cola barnicé el mueble con varias capas de barniz al agua para exteriores y añadí los tiradores de Ikea. Tienen razón, faltaba algo, el taladro para hacer los agujeros donde irían los tiradores atornillados.

Una vez puesta manos a la obra, no pude parar, es el síndrome del tuneo, el olor a cola me tenía embriagada e hice lo propio con una silla pequeña de Ikea. Le dí una capa de pintura dorada y forré la base con una tela de rosas. Como no tenía un producto para tratar la tela la forré directamente con aironfix que resultó un gran invento, ahí sigue la silla tan mona esperando a que alguien siente la cabeza. No se desesperen si entre tanto trajín pierden las tijeras doscientas veces, para solucionarlo les aconsejo utilizar tres pares, las tijeras son como las gafas, se buscan llevándolas puestas.

Otra idea más sencilla hubiera sido pintar las tapas directamente

Aquí les dejo un precioso bodegón como  resultado, el mueble que ahora decora la oficina de Bycarla. Espero haberos dado alguna idea para reciclar, tengo la casa llena de estos inventos, yo me lo tomo como manualiflexia, es muy relajante, cuando tenga otro ataque creativo no duraré en compartirlo con ustedes.

El bolso en primer plano pueden encontrarlo en Bycarla

Consejo para la piel de los bricomaniáticos:

Cuando terminan las manualidades las manos quedan echas un amasijo de cola, restos de papel, hilajos, pintura…es importante lavárselas bien para evitar alergias, después no hay nada mejor que aplicarse el Reparador de manos Carla Bulgaria Roses Beauty, metan una crema reparadora en su caja de herramientas! Está bien que yo lo diga yo que se lo que me digo, cuando la cosa ha ido a peores y uno se lesiona, algo que a mi me suele pasar a menudo con la euforia de la creación, como hacerme rozaduras en los dedos, cortarme o que se me quede alguna zona irritada a golpe de martillo, para estos casos aconsejo el Hidra Gel, un incondicional para servidora.