Muchas madres tratan de volver a recuperar la figura tras el embarazo, pero no es algo que resulte fácil. Según un estudio realizado por expertos de la Universidad de Chicago (Estados Unidos), casi el 75% de las mujeres que han dado a luz, pesan más que antes del embarazo un año después. Es más, el peso normal de antaño se puede convertir en sobrepeso u obesidad 12 meses después, en muchos casos el incremento de peso alcanza los 20 kilos.
En la investigación se analizaron los datos de 774 mujeres con un poder adquisitivo bajo, se determinó que hasta un tercio de estas mujeres que tenían peso normal antes del embarazo, sufrían sobrepeso u obesidad un año después del parto. Casi el 25% de las mujeres habían incrementado su peso corporal en 20 kilos, un 47% habían aumentado unos 4’5 kilos. Los expertos consideran que este cambio en el IMC puede estar relacionado con el embarazo, por eso creen que es importante planificar con ayuda del especialista médico el estilo de vida y la alimentación desde que se inicia la gestación.
Controlar el peso que se aumenta durante la gestación es un factor importante, algunas mujeres siguen creyendo en el mito de que hay que comer por dos porque se está embarazada, cuando lo único que necesitan en realidad es un incremento de 300 a 400 calorías adicionales por día durante el embarazo. Algo que merece la pena tener en cuenta, los expertos han constatado que la lactancia materna y el ejercicio moderado puedan ayudar a reducir el peso corporal tras el embarazo, lo que brinda otra ventaja más a la lista de beneficios de la lactancia materna, aunque de esto ya habíamos hablado hace unos meses.
Para los expertos, el mayor problema es el exceso de peso que cogen las mujeres durante el embarazo, cuanto más kilos se ganen, más difícil será deshacerse de ellos. En total, entre el peso del feto, de la placenta, el líquido amniótico, la retención de líquidos, etc., se suele engordar entre 9 y 14 kilogramos, todos los kilos que excedan del límite serán una tarea complicada para deshacerse de ellos. Claro que este estudio no se ha realizado de forma generalizada, como decíamos al principio, las mujeres que han participado tenían un poder adquisitivo limitado y ello podría haber influido en los resultados. Estas madres quizá no tenían dinero para poder ir a un gimnasio o un lugar seguro en su barrio para poder pasear o hacer ejercicio físico moderado, y por supuesto, la alimentación tiene mucho que ver.
Los expertos explican que cualquier mujer puede ganar peso en exceso durante el embarazo, especialmente si no se ha planificado y se sigue una dieta y un estilo de vida saludable, esto es algo que se recomienda encarecidamente. Quizá próximamente se realice un nuevo estudio tomando una muestra más amplia de madres y de todos los estratos sociales, de este modo se obtendrán resultados mucho más precisos. Podéis conocer todos los detalles del estudio a través de este artículo publicado en la revista médica Obstetrics & Gynecology.
Foto | Daquella Manera
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Recuperar la figura tras el embarazo es complicado