Los astronautas estadounidenses Wheelock y Caldwell desmantelaron ayer una de las dos bombas averiadas del sistema de refrigeración de la Estación Espacial Internacional, según informó la NASA.
Wheelock y Caldwell reemplazando la bomba.
En una tensa operación Doug Wheelock y Tracy Caldwell Dyson tuvieron que recurrir a la fuerza para desconectar una tubería que perdía amoníaco desde la anterior caminata que tuvo lugar el sábado pasado.
Seguidamente, los astronautas desconectaron cinco cables eléctricos y retiraron los cuatro dispositivos de desconexión rápida que unían la bomba al módulo de la estación.
Ahora, el módulo deberá ser introducido en la plataforma para su urgente reparación, ya que desde hace once días la estación únicamente dispone de un módulo de refrigeración, cruciales para el funcionamiento de los equipos electrónicos.
Una vez reparado, el módulo debe ser instalado de nuevo, para lo que será necesario que los astronautas se aventuren en una nueva actividad extravehicular.
Tras fallar todos los intentos de reparar el módulo averiado desde el interior de la plataforma, la NASA tomó la decisión de efectuar una caminata para corregir el problema.
La NASA reconoció que la operación de ayer era una de las más complicadas de la historia de la EEI, al tiempo que negó que la vida de los tripulantes de la plataforma corra peligro por contar con un único módulo de refrigeración.
Fuente: EFE