Me animo a continuar estos artículos de reflexiones hoy. Algunas personas todavía creen que si se convierten en una suerte de monstruo de Frankenstein en su interior, aglutinando miles de cosas en las que realmente no creen ni sienten vínculo alguno con ellas… Esto les aportará una solución a largo plazo.
Al principio se ponen la excusa de que les pilla de nuevas y se amparan en ser novatos. Pero luego va pasando el tiempo y lo de ser novato ya no va sirviendo. Empiezan a saberse la explicación de cabo a rabo. Saben explicarla a cualquiera, justificarla, defenderla… Todo y más… Salvo que todavía no conecta con ellos. Sigue siéndoles ajeno.
Muchos reconocerán en el título de esta reflexión una sentencia hecha famosa por José Ortega y Gasset, señor que sentó las bases del perspectivismo y muchas otras cuestiones filosóficas no menos importantes.
No obstante, a una de las cosas que más me recuerda a mí es que cada situación tiene montones de perspectivas… Y poder contemplar todas ellas es lo que da el dominio sobre la situación en general, en cierta manera. Conocimiento es poder, como sabemos todos.
También relaciono esto de manera inconsciente con el Modelo de Liderazgo Situacional de Hersey-Blanchard. En este modelo, se sostiene que un líder tiene opciones para cada contingencia y describen dichas opciones, la manera de evaluar las situaciones e identificar factores críticos de las mismas, y las acciones a emprender en la toma de decisiones. Pero te preguntarás por qué te cuento esto ahora.
La razón es muy simple… Aplicando todo esto al Autoconocimiento en vez de a los factores externos que mencionaba antes al hablar de las personas Frankenstein, se obtiene poder sobre uno mismo. Eres capaz de conocer tus opciones, evaluar tu situación e identificar los factores de riesgo, los de interés, lo que puedes cambiar a mejor, etc…
Y aprender a tomar decisiones y ceñirte a ellas.
Esta última característica no es muy común a demasiadas personas, si bien en el pasado era una doctrina que se inculcaba en el hogar a través de la educación. Hazlo, o no lo hagas… La decisión es tuya. Pero no te pongas excusas como “voy a intentarlo”. Esto no significa que dejes de hacer intentos, sólo que no conviertas el “intentar algo” en una justificación a lo que haces.
Tampoco significa ser inflexible, ni perder la capacidad de rectificar aquello en lo que te equivocas. Una persona que es incapaz de ser flexible se troncha por el peso de sus acciones. Una persona incapaz de rectificar sus errores paga las consecuencias.
Preguntes a quien preguntes, te dirán que descubrirse a uno mismo y desarrollar las capacidades son dos de los atributos clave de cualquier persona que aspire a una cierta forma de liderazgo.
Me gusta pensar que la gente que acude a mí lo hace porque quiere ser líder de sí mismo… Y un líder social, al mismo tiempo. Otros lo llamarían seductor. Pero a fin de cuentas, una cosa y la otra son indisociables e indistinguibles.
Otro día os contaré el paralelismo con los seductores… Con ayuda de mi amigo el Dr. Francis, quien ya está brindando las perspectivas y elaborando la exposición.
Kheldar