A pesar de las grandes diferencias entre las atmósferas de Venus y de la Tierra, los científicos han descubierto que los mecanismos que producen los relámpagos en ambos planetas son muy similares. El promedio de descarga, la intensidad y la distribución espacial de los relámpagos son similares.
Izquierda: Representación artística de un relámpago en Venus. Crédito: ESA.
Los hallazgos ayudarán a los científicos a comprender la química, la dinámica y la evolución de las atmósferas de los dos planetas. Estos resultados fueron presentados por el Dr. Christopher Russell en el Congreso Europeo de Ciencias Planetarias.
En misiones previas, como las Venera, Pioneer Venus y la nave Galileo, han reportado evidencia de ondas ópticas y electromagnéticas que podrían ser producidas por los relámpagos.
Esto también ha sido avalado por los telescopios terrestres que capturan destellos de los relámpagos en Venus. Aún así, las disferencias en las dos atmósferas ha motivado a algunos para afirmar que los relámpagos en Venus serían poco probables y por ello el tema ha sido controvertido.
El lanzamiento de Venus Express con su magnetómetro construído por el Instituto de Investigación Espacial en Granz, Austria, ha provisto una oportunidad para confirmar la presencia de relámpagos en Venus y estudiar en detalle su campo magnético a altitudes de 200 y 500 kilómetros.
'Pulsos breves y fuertes de las señales que se espera que sean producidas por relámpagos fueron vistas casi inmediatamente con la llegada a Venus, a pesar de la orientación magnética generalmente desfavorable para la entrada de señales en la ionosfera de Venus a la altura de las mediciones de Venus Express,' dijo el Dr. Rusell, de la Universidad de California.
Cuando las nubes se forman, ya sea en la Tierra o en Venus, la energía que el Sol ha depositado en el aire puede ser liberada en una descarga eléctrica muy poderosa. A medida que las partículas de las nubes colisionan, transfieren la carga eléctrica desde grandes partículas a otras más pequeñas, entonces las partículas grandes caen mientras que las pequeñas son transportadas hacia arriba. La separación de cargas lleva a los impactos de relámpagos.
Este proceso es importante para una atmósfera planetaria porque aumenta la temperatura y presión de una pequeña porción de la atmósfera a un valor elevado así se pueden formar las moleculas, las cuales no ocurrirían a temperaturas y presiones atmosféricas normales. Por este motivo, algunos científicos han especulado que los relámpagos pueden haber ayudado al surgimiento de la vida sobre la Tierra.
En nuestro planeta, ocurren cerca de 100 descargas de relámpagos cada segundo, pero en cualquier lado que estemos veremos muchísimo menos. De la misma manera con Venus, no vemos el planeta entero, y tenemos que calcular el promedio de aparición total con algunas afirmaciones sobre cuán lejos uno puede ver. Gracias a los nuevos sets de datos de Venus Express, el Dr. Russell y colegas fueron capaces de demostrar que los relámpagos son similares en potencia en la Tierra y en Venus a las mismas altitudes.
'Hemos analizado 3,5 años terrestres de datos de relámpagos de Venus usando datos de baja altitud de Venus Express (10 minutos por día). Al comparar las ondas electromagnéticas producidas en los dos planetas, hallamos señales magnéticas más fuertes en Venus, pero cuando las convertimos a flujo de energía encontramos una potencia de relámpago muy similar,' informa el Dr. Russell.
También parece ser que los relámpagos son más frecuentes en el lado iluminado que en el lado nocturno y suceden con mayor frecuencia en latitudes bajas de Venus donde la contribución solar a la atmósfera es más fuerte.
'Venus y la Tierra son llamados con frencuencia planetas gemelos por sus tamaños, masas y estructura interior similares. La generación de relámpagos es otra forma más en la cual Venus y la Tierra son gemelos fraternales,' dijo el Dr. Russell.
Más información:
Artículo en Astronomy.com
Página de la misión Venus Express
Fuente: Astronomy.com