Remedios para limpiar tus pulmones

Nuestros pulmones están expuestos cada día a contaminantes que se encuentran en el aire por los gases emitidos. Principalmente el humo de los coches. Para las personas que fuman o los fumadores pasivos aún es peor porque esta exposición incrementa de forma brutal. 

En este post os voy a dar algunos remedios naturales para limpiar los pulmones. Quisiera también motivar a los fumadores a que pongan un poco de fuerza de voluntad e intenten dejar de fumar. Muchas veces parece un reto muy grande pero os aseguro que se puede hacer y que todo el mundo es capaz de lograrlo, eso sí, debe estar bien mentalizado de que quiere que así sea. Uno de los remedios más comunes para purificar tus pulmones es hacer baños o inhalaciones de vapor. Los baños e inhalaciones de vapor ayudan a expulsar las flemas y la suciedad de nuestros pulmones. Sólo tienes que calentar agua y cubrir tu cabeza con una toalla poniendo la cabeza sobre el recipiente con agua de tal forma que puedas inhalar el vapor que sale del agua caliente. Te aconsejo que añadas eucalipto al agua para limpiar los pulmones más eficazmente. 
Es bueno que tomes jugo de aloe vera (sábila) al menos durante un mes dos veces al día.
El consumo de alimentos cítricos es fundamental para conseguir limpiar los pulmones. Y también sería bueno que añadieras nueces, espirulina, alfalfa y jengibre en la dieta. Siempre es aconsejable beber dos litros de agua al día pero en el caso de los fumadores esto se convierte casi en una obligación. 
Y aunque parezca mentira, para lograr una limpieza total de los pulmones hay que saber respirar. De esta manera el organismo puede corregir, reparar y eliminar los tóxicos y la limpieza es realizada con el ritmo y la correcta función pulmonar, utilizando al máximo la capacidad respiratoria.Cómo respirar correctamente?Para dejar sitio al aire limpio en los pulmones hay que exhalar una gran cantidad de aire estancado. Como muchas personas no han aprendido a respirar adecuadamente, siempre les queda una pequeña cantidad de aire acumulada en los pulmones, lo que las hace perder actividad y elasticidad. La respiración limpiadora, una exhalación profunda, lo elimina. Para lograrlo, inspira por la nariz y exhala por la boca, pero no demasiado rápido ni demasiado fuerte, pues puede provocar una hiper-ventilación.