Reseña #62: La Isla de Alice

Autor: Daniel Sánchez Arévalo Año edición: 2015 Nº de páginas:  616 págs.  Encuadernación: Tapa dura Editorial: Planeta Precio: 21,90 €
Ficha editorial
"Muchas gracias a Planeta por el envío de este ejemplar"
Cuando Chris muere en un accidente de coche sospechosamente lejos de donde debía estar, la vida de su mujer, Alice, con una niña de seis años y otra en camino, se desmorona. Incapaz de asumir la pérdida y con el temor de que tal vez su relación perfecta haya sido una mentira, se obsesiona con descubrir de dónde venía Chris y qué secreto escondía. Reconstruye el último viaje de su marido con la ayuda de las cámaras de seguridad de los establecimientos por donde este había pasado, hasta llegar al epicentro del misterio: Robin Island, en Cape Cod, Massachusetts, una pequeña y, solo en apariencia, apacible isla que modificará profundamente a Alice mientras busca respuesta a la pregunta: ¿Qué hacía Chris en la isla?
La isla de Alice oscila entre el thriller y el viaje emocional. Una historia de superación y una peripecia absorbente y cautivadora.
El director de cine Daniel Sánchez Arévalo nos regala una historia puramente americana, que le ha llevado a ser finalista del premio Planeta 2015. "La isla de Alice" relata el viaje de la protagonista para descubrir el secreto de su difunto marido, en una búsqueda obsesiva que la empujará a un período de cambios, dejando su vida atrás y mudándose a una pequeña isla con sus hijas y desde allí emprender una investigación que le llevará a conocer, sospechar y vigilar de los habitantes de la misma, desentrañando sus alegrías, peleas y secretos.
El autor ha construido unos personajes interesantes, entre los que destacan la protagonista y su hija de seis años. Alice ocupa el papel principal de la historia, una mujer valiente y, a la vez,  temerosa que se obsesionará con el pasado de su marido Chris y que provocará un comportamiento irracional a lo largo de la novela, despertando en el lector sentimientos encontrados, odiándola muchas veces y otras comprendiendo que todo lo que hace es su forma de afrontar el dolor por su pérdida. Por otro lado está Olivia, hija de Alice, una inocente niña divertida, tierna, ocurrente e imprevisible que te encandilará desde el primer momento.
La novela es estructurada en cinco partes, cuyos nombres llevan títulos de famosas novelas, estando relacionadas con las tramas que sucedan en cada una de ellas y en cierto modo con las fases que conlleva superar una pérdida irreparable. De esta forma nos encontramos a Moby Dick, La isla del tesoro, Robinson Crusoe, El hombre invisible y por último Alicia en el país de las maravillas.
La historia es narrada en primera persona por la protagonista con un estilo fresco, una narración no lineal, con saltos en el tiempo y llena de detalles que contienen un significado.
Como contras de “La isla de Alice” podemos señalar la extensión del texto (demasiadas páginas para la historia que cuenta), unas descripciones repetitivas y ciertos pasajes que pecan de lentitud o densidad (por ejemplo la búsqueda del principio) y que impiden considerar el libro de notable.
Esta novela, además de ser un viaje interior para encontrarse así mismo, es un retrato de la clase media-alta americana que ahonda mas allá de esa apariencia perfecta y agradable que muestran al exterior y deja entrever lo que en realidad intentan esconder.
“La isla de Alice” es por un lado una historia que combina el drama con toques de humor, por otro lado una novela de sentimientos, como el amor, la pérdida y los miedos, pero también de superación, esperanzas y sueños que convergen en el viaje de sus personajes y del mismo modo es un libro ameno de intriga y misterio.
Un viaje de huída, afectos y anhelos
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