Anna #1 | 333pp
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Theseus Cassio lleva cazando fantasmas desde que es capaz de empuñar la daga que heredó de su padre. Él y su madre llevan años sin permanecer mucho tiempo en una ciudad pues, aunque ella no desea que Cas siga los pasos de su padre hacia la muerte, comprende que es el único que tiene en sus manos la habilidad de acabar con esos sanguinarios fantasmas. El próximo destino de ambos será Canadá y el objetivo de Cas ya tiene nombre: Anna vestida de sangre. Un fantasma que resultará ser muy diferente a todos a los que antes se había enfrentado. Un fantasma que cuenta ya con casi cincuenta víctimas desmembradas. Pero que, por alguna razón, a Cas le perdona la vida.
Conduces tu coche, tranquilo, pensando en que cuando llegues a casa, saludarás a tu madre, comerás con ella y después te meterás a Internet a escribir una reseña, o simplemente a compartir chorradas divertidas en tu Facebook con tus amigos. Pero de pronto, la ves, haciendo dedo en una calle demasiado solitaria, oscura y peligrosa, y no te lo piensas dos veces. Es más piensas que te gustaría que ayudaran así a tu hermana pequeña, si es que tuvieses hermanas. Pero al poco rato de recogerla, de haberle tratado de dar conversación, te das cuenta de que algo no va bien. ¿Es tal vez su peinado o su vestido? No quieres pararte a pensar, pero sabes que ni siquiera es de aquella época. Tragando saliva, no sabes que estás a punto de morir. De pronto, cuando pasabas por aquella curva que tantas otras veces recorriste, la chica que recogiste se te tira encima del volante, y con una fuerza sobre humana, gira violentamente las ruedas en el pavimento, haciendo que te estrelles tal y como se estrelló ella hace tantísimos años, reviviendo su muerte una vez más, llevándote a ti como invitado especial. Cuando tú ya estás muerto, lamentando no haberte despedido de tu madre con un beso y un te quiero, ella vuelve a estar en el mismo sitio, haciendo autostop.
Si hubieses sido Cas Lowood, no estarías muerto; si hubieras sido Cas, la habrías subido al choche sabiendo lo que era y dispuesto a luchar. Dispuesto a enviar a esa chica adonde debería estar hace mucho tiempo. Pues a eso se dedica él, a matar lo que ya está muerto, a enviar lejos a aquellos cuya muerte les llegó de forma tan repentina, tan horrorosa, que lo único que pueden hacer es rememorarla una y otra vez y, si pueden, llevarse a alguien más con ellos en cada representación. Pero a Cas algo le ronda por la mente, algo le tiene obsesionado: Anna. Anna vestida de sangre. Sabe que Anna es diferente, sabe que es poderosa y no sabe qué esperar de ella, solo espera, espera la oportunidad de verla, de saber cual serán sus trucos y cómo él tendrá que liberarse de cada uno de ellos. Anna vestida de sangre no es un juego, es un fantasma diferente y nada más verla lo sabrá y sabrá que si sale con vida de esta es porque realmente tiene suerte.
Anna vestida de sangre es un soplo fresco a las historias de adolescentes. Si bien la historia paranormal está la orden del día en libros juveniles, ésta en concreto tiene toques que no podemos dejar escapar. Nada más empezarlo, no podía dejar de pensar en Dean Winchester de Sobrenatural (o Sam, el que ustedes prefieran) en su coche persiguiendo demonios y si vamos más atrás, por la acidez y la oscuridad, con menos alegría de la que a veces rebosa Sobrenatural, Buffy: cazadoras de vampiros. Y no es solo por estas similitudes que pensé en estas series, es más, Anna me recuerda a muchas cosas, no solo por lo visual de la narración, sino que me trae recuerdos que me gustan mucho. Adoro poder leer un libro e imaginarme las escenas como si estuviera viendo una película. Y se ve que la autora es fan de Stephen King y de otros fandom del terror más famoso. Sin ir más lejos, el vestido de Anna me recordó irremediablemente a Carrie White, uno de los personajes más importantes de Stephen King.
Esto no es nada malo, ya está todo inventado, y hacer en tu libro ciertos homenajes, al menos para mí, es algo divertido. Lo que realmente importa es cómo se presenta, y en eso Kendare Blake hace un gran trabajo. Me sentí cómoda leyendo su novela, en todo momento conecté con los personajes, me engatusó la historia principal, y las escenas sangrientas fueron la cumbre de mi clímax lector. No esperaba nada en Anna vestida de sangre y acabé cerrando el libro con una sonrisa. En muchas ocasiones me quise adelantar al argumento, comprobar que era posible adivinar el camino por dónde nos iba a llevar, pero no fui capaz, me sorprendió cada vez y todas mis conclusiones finales fueron equivocadas.
Kendare Blake nació en Corea del Sur y se crió en los Estados Unidos con sus padres caucásicos. Se licenció en Negocios, en Ithaca CollegueRecibió y luego hizo un Master de escritura creativa en la Universidad de Middlesex, en Londres. Ha escrito varios libros para jóvenes, en los que destacamos Anna vestida de sangre, una saga de terror adolescente. Si bien la relación amorosa peca de superficial y precipitada, al final no me ha molestado tanto. Ya estoy acostumbrada en la literatura juvenil. Eso sí, esta tiene a favor que tiene un “algo” que te engancha, a pesar de ser precipitada y algo tirada de los pelos. Me sentía pasmada en sus encuentros y quiero saber qué ocurrirá a continuación (ya que, como imagináis, esto es el principio de una saga). Los personajes están trabajados en relación a su importancia, hay unos bastante débiles y otros más fuertes, sea como sea, son bastante estereotipados y aquí recae otra de las sorpresas y es que, terminas cogiéndoles cariño a pesar de ello, porque la mayoría de las veces “salen el molde” para demostrar una personalidad propia dentro del propio arquetipo. Cas es un personaje carismático, eso jamás voy a negarlo, pero quien se roba toda atención es Anna, en cuanto aparece, es como un foco encendido en medio de la oscuridad. Llega a dañar tus ojos, pero tu intención es acercarte y no separarte de ese foco, es lo único que te hace sentir bien. Anna, desde que aparece, es una explosión de violencia, pero luego del rechazo inicial, se roba toda la luz del conjunto.
Puede que Anna vestida de sangre no sea la novela del año, pero hay algo que la hace especial. Destacaría en una estantería llena de otras propuestas juveniles, por su frescura y su arrojo. No trata a los jóvenes como idiotas, y nos enseña que en la literatura juvenil también existe el género de terror. Es un libro perfectamente escrito, te absorbe desde el principio y su propuesta te engancha de manera magnética. La autora ha sabido jugar sus cartas, puede que os guste más o menos, teniendo en cuenta el género, pero no os dejará indiferentes. La única pega, es que hay segunda parte que se llamará Girl of nightmares. Éste podría haber sido un gran final autoconclusivo, pero la autora ha decidido alargar la saga. Es una lástima, pero igualmente hay incógnitas que a mí me gustaría descubrir. ¿Quieres saber cómo te matara Anna? Pues deberás leerlo por ti mismo.
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ESCRITO POR KANON
Escritora en ciernes con una imaginación tan desbordante como su humor. Adora escribir, leer y escuchar música (sobre todo de Hey!Say!JUMP). Es la fundadora de Mientras Lees, pero también podéis encontrarla en Sweet Over, su bitácora personal.