Maite es una de las trabajadoras más eficientes de la fábrica. No le queda otro remedio: podría pagar con su vida cualquier infracción. Maite cultiva en secreto una gran pasión, el canto, y sueña con llegar algún día al legendario jardín del fin del mundo. Se dice que allí los rebeldes viven en total libertad y que es el único lugar donde aún sobreviven las luciérnagas. Su país, tras un largo conflicto, se ha convertido en una prisión fría y adusta. Las artes y las ciencias han pasado a ser un coto privado para una casta de elegidos, mientras el resto de la población está condenada a una vida llena de privaciones y fatigas. El único momento de distracción es la Ceremonia, una gran fiesta que se celebra todos los años para conmemorar el advenimiento de este nuevo régimen que se denomina Renacer. Maite siempre ha querido estar con los de arriba, pero el día en el que logra resarcirse al fin de los años de amargura descubrirá que, cuando se vive en un país donde ha muerto la esperanza, los sueños pueden convertirse en pesadillas.
OPINIÓN PERSONAL
Cuando vi su preciosa portada me animé mucho a leerlo. No obstante, al leer su sinopsis me eché un poco para atrás. Me pareció un poco infantil por las luciérnagas, quienes, finalmente, no aparecen prácticamente en el libro.
Maite es una adolescente de 16 años que trabaja en la fábrica amarilla desde que su examen se lo exigió cuando tenía cinco años. En esta sociedad no se puede llegar tarde al trabajo, tampoco contar historias divertidas... y mucho menos cantar, ya sea solo o en público. Cuando infringes una de esta norma eres castigado incluso con la muerte. Cuando Maite despierta tras haber soñado con el único lugar en el que sería libre, Garden, será consciente de que su despertador no ha sonado, llegará tarde a trabajar y el gobierno la cojerá. Queda muy poco para que la verja de la valla se cierre y Maite tan solo se encuentra a unos pasos, por lo que ni siquiera hace caso a la voz que la llama y sigue corriendo. Cuando consigue entrar se da cuenta que quien la llamaba era Érika, su mejor amiga, que ha quedado fuera de la valla. Maite la pide que se marche, pero es testigo de como se llevan a su amiga. Sin poder soportar esta situación Maite realiza un peligroso acto. Comienza a cantar...
Esta historia tiene sus puntos fuertes y sus débiles. Me ha parecido una trama muy similar a la de Los Juegos del Hambre. La idea de una ciudad en la que los trabajadores viven en en condiciones miserables, incluso pasando hambre, gobernados por un presidente al que todo temen, que vive en una ciudad en la que la gente puede permitirse lucir sobrepeso no me ha parecido original. Aunque sí que es verdad que la historia está muy pero que muy bien llevada.
Maite, es una chica con un fuerte carácter y muy segura de si misma. Es capaz incluso de dar su vida por salvar a aquellos a los que quiere. Su mayor desea es poder cantar sin temor a que la arresten, es decir, en Garden, el único lugar en el que puede ser realmente libre. Luca, es compañero de Maite en la fábrica amarilla. Es protector y muy atento con ella. Érika es la amiga que creció al lado de Maite. Es apresada por el presidente, y por ello Maite emprende su búsqueda. El siguiente personaje más importante sería el hijo del presidente y un poco con menos protagonismo Lucilla, una artista a la que matan y asignan su puesto a Maite.
El romance que hay no se manifiesta hasta el final, y personalmente creo que fue entre los personajes equivocados...
Me esperaba un pluma pesada y aburrida, pero Emma me ha sorprendido gratamente. Es muy secilla y rápida de leer. Se que es corto, pero la manera de Emma de narrar la hace todavía mas veloz y entretenida.
No es un libro que podamos llamar predecible, ya que te quedas con muchas dudas en su final, asi que no podemos saber si lo que esperábamos es cierto o no.
En resumen, Garden ha sido un libro que me ha gustado bastante. Dista mucho de ser una historia original, pero la autora logra darle un toque especial y llevarla a su terreno. Si queréis algo fresco y adictivo, probadlo.
PUNTUACIÓN FINAL
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