La verdad es que me soné de la risa con este relato. Es tan exagerado, bizarro, con escenas tan fuera del lugar que solo podía reír, reír y reír.
Nuestro protagonista es un chico que va a la primaria, es muy extraño y tanto sus compañeros como los vecinos lo saben. Un día a este pequeño se le mete a la cabeza el sueño de ser un vampiro, nada más ni nada menos que un vampiro.
Entonces primer se obsesiona con la novela de Drácula, leyéndola una y otra vez, hasta que se la aprende de memoria; después empieza a molestar a un murciélago que se encuentra en el zoo.
El final es muy bizarro y yo no podía mas de la risa, en honor a este relato, al pie del mismo, tuve que dibujar mi reacción con respecto al protagonista.
Tienen que leerlo, no se van a arrepentir.