Reseña: la ciudad mágica, edith nesbit

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Título: La ciudad mágica Autor: Edith NesbitEditorial: BereniceNúmero de páginas: 295¿Saga?: No. AutoconclusivoPrecio: 15€

Helen, hermana mayor y único miembro de la familia de Philip, se ha casado, y él debe marcharse a vivir con su nueva hermanastra, Lucy. Al principio todo son problemas. Arrojado a un mundo diferente al de su idílica vida anterior. Philip se siente abandonado por su hermana mientras ella disfruta de su luna de miel. No aguanta a Lucy, a pesar de los esfuerzos de la chica por llevarse bien con él. Además, ha caído en manos de una niñera intransigente y de aspecto inquietante, que cada vez lo deja más aislado. Durante una ausencia de la niñera, Philip decide desobedecer y entretenerse mediante la construcción de una de esas ciudades mágicas que construía con su añorada Helen. Para ello, como siempre, se servirá de multitud de objetos de la casa: piezas de cubertería, candeleros, tableros, cubos, juegos, libros, placas, tazones, etc. Una noche, mientras se escabulle de los miembros del servicio de la casa, cae en un profundo sueño que le adentra en un mundo extraño. Además se encuentra allí, y no por casualidad, a su hermanastra Lucy. ¿Es realmente un sueño? ¿Qué hace allí la pesada de Lucy? ¿Cómo es que les suenan a ambos algunos edificios de esa curiosa ciudad? Y, ¿por qué los apresan esos guardianes con aspecto de soldaditos de plomo? 

Este libro ha sido cedido por la editorial Berenice, con la que colaboro. Desde aquí, muchas gracias. Más información sobre sus publicaciones visitando la web.

¡Primer clásico infantil reseñado! Ya era hora, ¿verdad? Para los que no lo sepais, en junio me propuse un reto de leer doce clásicos infantiles, uno por mes. Y lo podéis encontrar aquí, por si os interesa. Este en principio no estaba en la lista, pero lo he añadido porque cuando vi la sinopsis no me pude resistir a esta historia tan llena de magia y fantasía, además de a la edición tan preciosísima que la editorial se ha currado, ¡teneis que ver las ilustraciones, de verdad!. La ciudad mágica es una historia sobre niños, sí, pero que os aseguro que está escrita para maravillar a los adultos.
La ciudad mágica nos presenta a Philip, un chico que ha sido criado por su hermana mayor, Helen, y a la que prácticamente ve como a una madre. Ella es su familia y él la de ella. A Philip le parece que todo es bastante maravilloso tal y como está, con sus clases por las mañanas, sus juegos durante el resto del día y la afición por construir increíbles ciudades donde los libros pueden ser edificios y las piezas de ajedrez carreteras. Sin embargo llega un día en el que las cosas cambian (y para peor, si le preguntan su opinión) cuando Helen se reencuentra con un viejo amigo de la infancia. De alguna manera una cosa lleva a la otra y Helen se termina casando, yéndose posteriormente de luna de miel a vete tú a saber dónde y dejando a Philip abandonado en la inmensa granja de su reciente marido. Allí, tan sólo en compañía de Lucy, la hija de este -y a la que Philip no quiere cerca, por puros principios-, y una niñera gruñona que nunca le deja tocar nada, Philip se siente terriblemente solo. Lo único que parece salvarle de su aburrimiento es la imponente ciudad que está construyendo en la sala de juegos. Lo que no puede ni imaginarse es que una noche será arrancado de su cama y transportado a un lugar tan extraño como impresionante. ¿Qué pasaría si todas esas ciudades que ha ido creando a lo largo de los años existieran realmente? ¿Y si Philip hubiese viajado a otra dimensión, a un lugar creado de la magia y su propia imaginación? Sería perfecto, claro, si no existiera una profecía que no aclara si él será el héroe o el villano de esta historia y, sobre todo, si no se viera obligado a pasar siete terribles pruebas para definirlo.

-Pero qué lio, cuando quieres hacer algo y al mismo tiempo no quieres hacerlo, entonces, ¿qué se puede hacer? Esto da mucho que pensar. -Cuando eso ocurre sólo hay una cosa en la que no puedes pensar-dijo Helen. -¿Qué?-preguntó Philip. -En ti mismo.

Nos encontramos ante una novela narrada en tercera persona y divida en capítulos bastante largos, pero que nos cuentan una gran variedad de historias plagadas de acción al mismo tiempo, lo que consigue que la lectura no se haga pesada y avances casi sin darte cuenta. Aunque Philip se presenta durante el primer tercio del libro como el personaje principal, pronto descubrimos que son muchos los que tienen que decir algo en esta historia, aportándonos variedad de subtramas. Y si hablamos de definiciones, encontrar la palabra adecuada para describir el estilo narrativo de Edith Nesbit es muy difícil, así que vamos a dejarlo en peculiar, especial, muy particular. Vamos, de ella y de nadie más. Un estilo fresco y directo, del que si tengo que destacar algo es que aún cuando el narrador es omnipresente, a veces la autora se dirige directamente al lector,  lo cual en muchísimos momentos me ha resultado ameno y particularmente divertido.
¿Os gustan las historias con un punto excéntrico y surrealista? Bien, pues esta es la vuestra. Con cierto toque que me ha recordado a Lewis Carroll, autor de Alicia en el País de las Maravillas, en esta novela podemos encontrarnos desde árboles que dan bollitos de canela hasta isleños que viven con miedo al océano, pasando por multitud de acertijos, canciones y poesías, que de una manera u otra se entretejen con la trama. La ciudad mágica es ante todo un libro con un transfondo educativo y bonito, que nos habla del poder y la fuerza de la imaginación, de cómo creyendo y teniendo fe podemos llegar a encontrar cualquier cosa que busquemos, que destaca valores como la amistad, lealtad y el valor para afrontar cualquier problema. Por último, algo que me gustaría destacar es que Edith Nesbit se suma a los autores infantiles que hacen una disimulada crítica a la sociedad de la época a través de sus cuentos y novelas. La ciudad mágica fue escrita en 1910, y si sabéis algo sobre historia, podemos encontrar varias referencias y guiños a la revolución industrial y sus consencuencias e incluso a los órganos gubernamentales. Sin duda, si queréis volver a recordar los cuentos de vuestra infancia, sumergiros en un caótico mundo donde todo es posible y vivir aventuras junto a Philip, ¿a qué estais esperando? ¡Leed La ciudad mágica! 

PUNTUACIÓN: 

Después de este libro hasta tú querrás construir tu propia ciudad.

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