Que Sherlock Holmes es un personaje fascinante e inmortal no lo duda nadie. A pesar de que su autor, Arthur Conan Doyle, nos legó una buena cantidad de aventuras de su inolvidable detective, para sus lectores nunca han parecido ser suficientes, porque se han escrito muchísimos más casos apócrifos desde entonces, y aún hoy sigue habiendo autores que se atreven a tomar el relevo. En los últimos tiempos, además, hemos visto que se han publicado varias nuevas series juveniles centradas en el inmortal Sherlock, como Los Irregulares de Baker Street, dedicadas a los chavales de los bajos fondos que lo ayudaron en algunos casos (y que se mencionan en los libros originales) o Enola Holmes, protagonizada por una supuesta hermana del detective (que no aparece en los textos de Conan Doyle). Ahora le toca el turno a El joven Sherlock Holmes, una serie que se atreve a indagar en los orígenes del famoso investigador, y que lo presenta como un adolescente retraído, brillante ya entonces, pero resentido contra su origen humilde y la falta de oportunidades que éste le confiere. En El ojo del cuervo, Sherlock muestra interés por el brutal asesinato de una joven en el barrio de Whitechapel. Convencido de que el acusado, un muchacho de origen egipcio, no es culpable del crimen, Holmes empieza a investigar, pero se implica de tal modo que termina siendo considerado cómplice del asesinato. Huyendo de la justicia, deberá encontrar al verdadero asesino antes de que Mohammed sea ejecutado.
El joven Sherlock Holmes es una serie de la cual, hasta ahora, se han publicado cuatro títulos en inglés. El ojo del cuervo, el primero que aparece en castellano, es una novela de misterio de la cual destacamos su estilo cuidado y, sobre todo, su magnífica ambientación, que recrea a la perfección el Londres victoriano y está repleta de guiños a la obra de Arthur Conan Doyle. En principio, parece que la serie es muy fiel a las novelas originales, aunque algunos detalles parecen escogidos expresamente para actualizar la trama (por ejemplo, se insiste mucho en el origen judío de Sherlock Holmes, y no es casual que deba ayudar al musulmán Mohammed; o, sin ir más lejos, la importancia que tiene la presencia de una chica, Irene Doyle -nuevo guiño a los holmesófilos- para la resolución del misterio). En resumen, una lectura recomendada para los amantes de la novela de misterio, y además presentada en una preciosa edición, muy cuidada por parte de la editorial Almadraba. Así que coge tu lupa y sigue la pista: el joven Holmes tiene un nuevo caso que resolver.