April, May y June son tres hermanas que acaban de mudarse de Orange County a The Valley. Sus padres se acaban de divorciar, su padre ha conseguido un trabajo en Houston y ellas van a quedarse a vivir con su madre. Se han tenido que cambiar de instituto y cada una de ellas se toma de manera muy diferente eso de ser «la nueva»: April intentará adaptarse y conocer a la gente, May pasará de todo, yendo a su propio ritmo como hacía antes, y June intentará formar parte del grupo de las populares.
La cosa se pone interesante cuando las chicas descubren que tienen poderes: April puede ver el futuro, May puede hacerse invisible y June lee las mentes de los demás. Cada una de las hermanas lidiará como puede con sus problemas de adolescentes (y de chicos) sumados a sus poderes. En particular, a May le preocupa una visión que se repite en su mente, en la que una de sus hermanas es atropellada por un coche.
La novela está narrada en primera persona, pero desde tres puntos de vista diferentes. Cada hermana se va alternando en la posición del narrador, y así el lector tiene una visión general de los sentimientos y pensamientos de cada una de ellas a la hora de enfrentarse a sus poderes. Quizás, después de leer el libro, nos hubiera gustado saber algo más acerca de cómo han llegado esos poderes a las chicas, o si alguien más posee ese don, pero la historia se centra en las tres hermanas y la información que obtenemos está determinada por sus puntos de vista.
Los numerosos diálogos, la narración ágil, los cambios de narrador, algún lío amoroso y la relación entre April, May y June harán que termines la lectura de este libro sin que te des cuenta. Robin Benway es la autora de Audrew, wait!, una novela también muy divertida cuya reseña puedes leer en el número 17. Los extraordinarios secretos de April, May y June tiene mejor ritmo y más humor, aunque el verdadero secreto de su éxito es la relación entre las hermanas. Sólo por eso, ya merece la pena leerlo.
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