Reservas fluviales de la Sierra Norte de Guadalajara

De acuerdo con la normativa europea de protección de espacios fluviales con escasa intervención humana y buen estado ecológico,el Gobierno declaró, el pasado 20 de noviembre, 82 reservas fluviales en todo el país (de un total de 135 previstas) con 1.752 kms. Entre ellas figuran dos correspondientes a la Sierra Norte de Guadalajara: los ríos Jaramilla y Jarama (en su curso alto). Estos son algunos de sus argumentos:

Río Jaramilla: desde su nacimiento hasta su desembocadura en el rio Jarama. Un total de 23,32 kms.
Encuadre geológíco: cuarcitas, pizarras, areniscas y calizas. Calidad de las aguas, muy bueno
Vegetación de ribera y fauna: saucedas, alisedas, abedulares y fresnedas. No hay especies invasoras. Aquí habita la trucha común.
Valoración general: Excelente. Constituyen una buena representación de los diferentes tramos de un río de montaña mediterránea; por su alto grado de naturalidad, buen estado de conservación y ausencia significativa de presiones del hombre.

Río Jarama: desde su nacimiento hasta el pantano de El Vado, en total 27,99 kms.
Encuadre geológíco: cuarcitas, pizarras, areniscas y calizas, gneisses. Calidad de las aguas, muy bueno
Vegetación de ribera y fauna: saucedas negras y salvifolias, alisedas, abedulares y fresnedas. No hay especies invasoras. Especies autóctonas: trucha común, barbo, boga común y nutria.
Aprovechamiento: ganadero, infraestructuras hidraúlicas, viales y caminos, áreas recreativas
Valoración general: Bueno. En su cabecera el cauce es estrecho y confinado, aunque poco caudaloso, formando una sucesión de saltos, pozas y rápidos. A medida que descendemos el valle se abre y el río corre más remansado. El río Jarama constituye una serie de corredores ecológicos, que conectan distintos ecosistemas y facilitan el desplazamiento de vertebrados, conformando un paisaje fluvial de gran belleza, bien conservado y sin presiones del hombre.