Como bien ha dicho Virginia la solución a la adivinanza anterior es el perro vinagre o de matorral (Speothos venaticus). Una rápida descripción de este cánido sería: un cuerpo en forma de largo y rechoncho con unas patas cortas, vamos que parece más una comadreja que un perro. Esto es una adaptación al ambiente en el que vive: las selvas humedas sudamericanas, ocupando un territorio que abarca los estados de Brasil, Argentina, Paraguay, Perú, Venezuela, Colombia, Surinam, Guayana, la Guayana Francesa, Ecuador, Panamá y, posiblemente, Costa Rica.
Dentro de los cánidos es el que posee una dentadura más carnivora, de hecho se alimenta exclusivamente de carne. Con sus 63 centrímetros de altura caza en manadas formadas hasta por seis individuos, depredando especialmente sobre pacas (Agouti paca) y agutís (Dasyprocta sp.). Incluso se ha informado, pero no confirmado, la caza de especies considerablemente más grandes que este animal, como capibaras (Hydrochaeris hydrochaeris), venados del género Mazama, ñandús (Rhea americana) y, lo que resulta más sorpredente, tapires (Tapirus terrestris) (1). ¡Vamos un chucho a tener en cuenta!. Y es que, por si todo esto fuera poco, presenta una membrana interdigital que le permite nadar, salvando los grandes ríos de la región.
Este video linkeado de ARKive se aprecia a una manada de perros vinagre en plena acción
Pero el perro vinagre no es la única especie que ha existido del género Speothos. En el Pleistoceno existió una especie de mayor tamaño S. pacivorus, que aparte de ser más grande se diferenciaba por ciertos rasgos dentales. Tradicionalmente se ha considerado al perro vinagre estaba muy relacionado con el licaón (Lycaon pictus) y el cuon (Cuon alpinus). Sin embargo, no todos compartían este pensamiento y lo relacionaban de forma muy íntima con el atelocino o zorro de oreja corta (Atelocynus microtis), formando el clado del Cerdocyon (1). Como curiosidad decir que en el grupo también se incluía al perro mapache (Nyctereutes procyonoides) originario de Asia oriental pero introducido en algunas partes de Europa. ¿Cómo explicar que la mayoría de los parientes vivan al otro lado del mundo? Pues de la forma más sencilla posible, es decir, mediante antiguos puentes de tierra y, como no, recurriendo a la omnipresente Beringia, a trevás del cual el antepasado común de todas estas especies se dispersó al continente amarillo. Pero como nada es eterno (y menos en las eras glaciares) Beringia fué de nuevo engullida por las aguas el perro mapache quedó aislado en Asia del resto de sus parientes. Ante esta controversia y, cada vez de forma más habitual, los estudios moleculares ayudaron a arrojar luz a la controversia taxonómica del perro vinagre. Éstos basados en ADN mitocondrial acabaron por finiquitar las teorias anteriormente explicadas. Así pues ahora sabemos que el pariente más cercano del perro vinagre es otro curioso cánido sudamericano, el lobo de crin (Chrysocyon brachyurus), del que me gustaría hablaros algún día.
Como es habitual siempre que se habla de fauna tenemos que hablar del estado de conservación de este cánido. Pues bien, está catalogado como amenazado en calidad de vulnerable (VU) por la UICN. La principal amenaza que se cierne sobre el perro vinagre es el cambio de uso del suelo al que se puede ver sometido su hábitat y a una posible persecución por parte de los humanos. Eso sí este animal es bastante difícil de encontrar ya que es muy sensible a las alteraciones en el medio, así que puede ser un buen indicador de la salud del ecosistema.
A todo esto felicidades a Virginia por acertar, aunque me temo que Darkrosalina también lo sabía ;)
Bibliografía:
- Zuecher, G. L.; Swarmer, M.; Silveira, L. & Carrillo, O. Bush dog (Speothos venaticus).PDF.
- Bello Beisiguiel, B. & Zuercher, G. L. 2005. Speothos venaticus. Mammalian species 783: 1-6. PDF.