Durante mucho tiempo, amigos y conocidos de nuestra Asociación nos han preguntado si habíamos entrado al nacimiento del Río Aguasmulas o si sabíamos cómo de grande era la cueva donde nacía. Nosotros nunca habíamos estado por esa zona, pues nuestro lugar de trabajo s se centra en otras latitudes. El Río Aguasmulas es un pequeño afluente del Río Guadalquivir que nace en un gran roquedo conocido como El Banderillas, en el término municipal de Santiago-Pontones, en el Parque Natural y Reserva de la Biosfera de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas.
Los Merguizos del Río Aguamula en época de lluvias (Autor: Luis Cano)
En época estival, una maravilla paisajística nos muestra su importancia, pues el río nace a través de varias surgencias (polisurgencias), unas a ras del lecho y otras bastante más altas. Aquí son conocidos los “Merguizos, Mellizos o Gemelos del Aguamula”, que actúan como “trop plein” cuando el acuífero está cargado (trop plein: surgencia esporádica de agua que sale al exterior cuando el acuífero se llena tras fuertes lluvias. Un ejemplo claro de trop plein cercano es la famosa Cueva de los Chorros, el nacimiento del Río Mundo en Riópar, Albacete).
Los Merguizos del Río Aguamula en época de lluvias (Autor: Luis Cano)
Nuestro amigo Luis Cano Cavanillas nos comentó que sería importante ver esta surgencia, pues le parecía muy importante ya que podría recoger el acuífero el agua de todos los Campos de Hernán Perea. Han sido muchos los meses que hemos estado pendientes del tema, esperando a que la climatología acompañara pues hay un gran pateo hasta la zona y teníamos que ir con mucho material… hasta el domingo 2 de Octubre de 2016, gracias a la ayuda, al apoyo y a la colaboración del María Teresa Moro, David Cuerda, Pablo Foronda y Miguel Ángel Castillo, del Parque Natural y Reserva de la Biosfera de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas.
Exploración de la polisurgencia del Río Aguamula por el G.E.V.; en el círculo inicio de la progresión vertical hacia la flecha (los llamados Merguizos) (Autor: Roque Latorre)
Hasta allí nos desplazamos los miembros del G.E.V. (Jesús, Roque, Leo, Fátima, Alberto, Juanjo, Antonio y Cristina) y Miguel Ángel Castillo, Agente Forestal y que trabajó como uno más en esta exploración. Se inició la caminata hasta la zona, y de ahí hasta la parte más baja de los llamados “Merguizos”. A partir de este momento hicimos dos grupos de exploración, uno subiría mediante técnicas de progresión alpina, hasta coronar las entradas de mitad de roquedo y que hemos dicho antes, y otro grupo verían las otras surgencias laterales del Río Aguamula.
Comienzo de la progresión (Autor: Roque Latorre)
Estas pequeñas surgencias no dieron buenos resultados, pues son pequeñas cavidades muy fisuradas. Y el otro grupo, tras más de 3 horas y más de 40 metros de subida casi vertical, logran llegar a los “Merguizos”. Aquí se encuentran que existen fisuras y fracturas muy pequeñas, intentando progresar sin equipo y sin éxito. Son pequeñas aberturas impenetrables para el ser humano.
Progresión hacia Los Merguizos (Autor: Roque Latorre)
Por tanto, estamos hablando de una polisurgencia activa que actúa de trop plein en épocas de lluvias, pero la red de galerías subterráneas son muy estrechas y no cabe una persona, de ahí que cuando el acuífero entra en carga y “revienta”, esa presión con la que avanza por esa red de pequeñas fisuras y galerías subterráneas hace que su salida desde “Los Merguizos” sea tan impresionante como las fotografías que hemos expuesto anteriormente. El medio hipogeo en este caso es sumamente pequeño y estrecho, por lo que no se puede progresar hacia su interior.
Casi en la zona más alta visible desde abajo, todavía faltaban más de 15 metros hasta llegar a la salida de la surgencia más alta (Autor: Roque Latorre)
Por tanto, y tras muchos años en espera, hemos resuelto el misterio subterráneo del Río Aguamula. Queremos dar las gracias Luis Cano Cavanillas por la cesión de estas imágenes, así como por alentarnos a ir a explorar este trop plein tan espectacular que no conocíamos. También agradecer a todas las personas que nos han ayudado y colaborado del Parque Natural y Reserva de la Biosfera de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villa, en especial a Miguel Ángel Castillo.
Participantes de la expedición (Autor: Roque Latorre)