Desgracia / J. M. Coetzee.
David Lurie, el protagonista de esta historia asiste –y nos hace asistir- a una realidad dura, inclemente, extremadamente desagradable. Lo que me gustó de Desgracia no es el tema o la trama que te pudre la conciencia y te llena la cara de gestos de horror mientras la lees, lo que me gustó fue la prosa de Coetzee: ágil, divertida, profunda, un premio Nóbel muy merecido para un tipo que parece inteligente, brillante, pero no pedante.