En el artículo anterior sobre RetroMadrid os contamos que tal fue la mañana del sábado y lo dejamos justo después de recuperar fuerzas con una comilona en el centro de la ciudad. Antes os presentamos una original crónica de un amigo novato por estas lides, que nos acompañó y que quedó prendado con todo lo que se cocía en Madrid, y a continuación os relatamos lo que dio de si la tarde del sábado, cuando, por fin, pudimos detenernos a hablar con algunos de los expositores.
Tras un par de viajes en el metro y resistir las ganas de pegarnos una buena siesta en el hotel, volvimos a Matadero bastante tarde, lo que desgraciadamente provocó que os perdiéramos la conferencia de Luis por completo, y el podcast de El Club Vintage en homenaje a la revista Loading al que nos hubiera encantado asistir. En cualquier caso Tonichan y su equipo han subido ya el podcast para que podáis escucharlo tranquilamente en casa. Se hacía tarde y Locomalito y Gryzor nos saludan orgullosos junto a la máquina arcade que alberga su juego: “Es una pasada, hacia tiempo que no veíamos colas esperando para jugar a una recreativa”, nos comentan, y lo cierto es que es así, el mueble no paraba de recibir jugones que se ponían a prueba a los mandos de este particular Amadis de Gaula. Sin embargo no sería hasta el domingo el momento en que realmente reluciría con la celebración de la final del torneo.
Locomalito disfrutando de una partida con la máquina
Dejamos a los dos desarrolladores indie para darnos una vuelta por los expositores ahora que parecía que el número de visitantes había bajado un tanto, y empezamos por los organizadores del cotarro, la AUIC (Asociación de Usuarios de Informática Clásica). En el stand pillamos a Iván y Óscar quienes nos contaron que les encantaría “que Madrid tuviera un museo retro fijo en la ciudad, similar al que pueden encontrarse en otras ciudades europeas”. Desgraciadamente parece que el apoyo institucional brilla por su ausencia, y que para esta edición de RetroMadrid han tenido que sudar de lo lindo a la hora de sacarla adelante. Por eso aparte de contar con el apoyo de algunos patrocinadores como el propio Game, animan a que todos los que disfruten con este tipo de actividades se asocie mediante la inscripción que podéis encontrar en su página web: “La gente tiene muchas ganas de venir, hay muy buen ambiente como podéis ver, aunque es complicado organizarlo debido a en parte a los costes que genera un evento de este tipo. Este año tenemos más o menos el mismo número de expositores”, continua Iván, “aunque hay más torneos y seguramente más visitantes”. Preguntamos también a Iván que piensa de Locomalito y sus juegos, “Es un soplo de aire fresco, encontramos en sus juegos, como Hydorah, mi favorito, grandes recuerdos y vivencias”.
Muchas ganas de que el retro perviva siempre
Dejamos la AUIC y aprovechamos que el Grupo de Usuarios de Amstrad (GUA) estaba justo a su lado, para preguntarles qué les estaba pareciendo RetroMadrid hasta el momento: “Es toda una experiencia poder ver a una familia al completo y que el padre les diga a sus hijos que este o aquel era el ordenador de su infancia. Es muy divertido ver la cara que ponen los chavales al comparar estos ordenadores con lo que han visto actualmente”. Sin embargo, el stand, literalmente atestado de sistemas Amstrad guardaba unas cuantas sorpresas. Primero pudimos jugar con la conversión de ‘Invasion Zombies’ en CPC, en la que es la primera incursión de Relevo en este sistema. Hace unos días hablamos de este lanzamiento en RetroManiac.
Parece que los chicos de la GUA nos estaban esperando...
Aprovechamos el pad de la GX4000 para sacarle partido a esta mezcla de plataformas y juego de acción que ya pasó por los circuitos de MSX y Spectrum hace unos años. Ideafix también aprovechó para mostrarnos un prototipo de chip ‘flasheable’ muy interesante, y Habi de Amstrad.es no perdió la oportunidad de mostrarnos su excelente conversión a PCW de La Abadía del Crimen a partir del juego original para CPC: “Lo terminé a finales del año pasado, después de haber desemsamblado el juego original para CPC para estudiarlo y emular algunas rutinas gráficas en el PCW, que gracias a su mayor memoria y velocidad de proceso hace que prácticamente sea idéntico en cuanto a velocidad”. Habi no sólo tuvo que lidiar con un trabajo de ingeniería bastante profundo, sino que además adaptó los gráficos en colores a la limitada paleta del PCW de Amstrad. Todo un trabajo de dedicación y amor por este clásico de las pequeñas oficinas a mediados de los 80.
La conversión de La Abadía en un PCW. ¡Qué tiempos!
Y cuando creíamos que lo habíamos visto todo os pegaron el soplo… “Psst, psst…” Ahí se acercaba Mauri también de la GUA y habitual del foro en amstrad.es con un misterioso sobre blanco en una mano y una sonrisa en la cara. Ávidos de más información, Mauri se nos hizo un poco el remolón al principio, pero como un niño con zapatos nuevos no pudo resistir y nos mostró el contenido del sobre. Nada menos que en primicia el prototipo de un nuevo chip que aumentará las posibilidades del CPC exponencialmente. “Lo recibí ayer mismo”, nos comenta Mauri, “Es una especie de tarjeta de sonido que añade tres canales internos de sonido para música y efectos fx gracias a un chip de Yamaha. Es compatible con todos los modelos CPC”. Un bombazo para la escena que no se queda ahí según Mauri, pero que de momento no dirá nada más: “Ya hay 10 prototipos en manos de desarrolladores para el Amstrad que están expectantes con el proyecto. Hemos distribuido ya rutinas creadas para que estos grupos lo puedan utilizar en sus producciones”.
Pequeño pero matón, el prototipo que nos mostró orgulloso Mauri
Le preguntamos entonces quién es el artífice de esta pequeña nueva maravilla, y resulta que detrás está nada menos que Richard Gatineau (TotO de Easter Egg), nada menos que el impulsor del fantástico remake de R-Type para CPC: “Gente por ejemplo como Fano o Axelay están encantados de dar soporte. Muy pronto tendréis más noticias de esta maravilla”, termina Mauri. Y no es para menos, os podemos asegurar que estéis atentos porque este nuevo desarrollo guarda más sorpresas en su interior. Tiempo al tiempo...
El juego de Relevo estuvo bastante solicitado
Después de este subidón de adrenalina, no podíamos irnos del stand de Amstrad sin charlar un rato con Alejandro (Rhino) del Batman Group, otro de los principales impulsores de la escena del CPC que se encontraba de capa caída (y nunca mejor dicho) hace un par de años. Hace un par de años Rhino junto al resto de su grupo publicó una estupenda demo, ‘Batman Forever’ que dejó a los usuarios del ordenador simplemente anonadados con el nivel técnico y narrativo obtenido. Para Rhino “en la escena del CPC había menos gente haciendo cosas, sobre todo si lo comparamos por ejemplo con el C64. La comunidad era algo cerrada por lo que costaba avanzar, no se evolucionaba”. Así fue como Batman Group decidió aparcar el Amiga y centrarse en sacarle el juego al CPC olvidando las supuestas limitaciones del Amstrad, “Nuestro punto de vista era sencillo, queríamos hacer determinadas cosas que nos obligaba a buscar técnicas nuevas, exprimirnos la cabeza y en olvidarnos de los convencionalismos anteriores. Una demo no es sólo una serie de efectos seguidos, sino que conlleva un mensaje, como el de que Batman Group ha vuelto”. Y no es para menos, echadle un vistazo a la susodicha demo si aún no lo habéis hecho, y comprobaréis con vuestros propios ojos hasta donde puede llegar el CPC.
Alejandro de Batman Group charló un rato con nosotros
Ahora sí, abandonamos el stand de Amstrad con muy buen sabor de boca y la sensación de que la escena de este venerable ordenador va a más. Ponemos rumbo a la zona donde se apostaba la AUMAP (Asociación de Usuarios de Máquinas Arcade y Pinballs), y que por fin se encontraba un poco despejada, después de que docenas de jugones disfrutaran con las máquinas arcade y los ‘petacos’ que habían traído. Allí fue donde un más que amable Juanqui nos explicó la idea que habitaba detrás de la AUMAP, “La Asociación trata de promover el hobby de las máquinas arcade y el pinball más clásico, desde el trabajo de recuperar máquinas antiguas y fomentar su uso para no perder el espíritu, hasta apoyar a todo aquel que tenga la inquietud de hacerse con un mueble arcade”.
Posiblemente la recreativa más pequeña del lugar...
Y a fe que lo consiguen gracias al buen repertorio mostrado en el área donde se apostaban máquinas nuevas como unos divertidos micro muebles, “esas llevan por un lado una Game Boy Advance dentro, con su pantalla y el interfaz adaptado para los botones arcade., y por otro una Dingoo, más versátil para los emuladores”, o los clásicos muebles restaurados que hacían las delicias de los visitantes más nostálgicos, “hemos traído como novedades un Space Invaders, un Ms. Pac-Man y el Zero Time, o lo que es lo mismo, el Galaxian versión española”. Lo cierto es que la restauración de los muebles era perfecta, una pasada. Juanqui nos animaba también a formar parte de la asociación a poco que nos gusten las máquinas de este tipo, y a pasarnos por el foro siempre que necesitemos ayuda al respecto o busquemos algún modelo en particular.
El aspecto de la máquina de Zero Time en la zona de la
AUMAP era simplemente maravilloso
Seguimos nuestro periplo visitando fugazmente el stand de Matra, donde podíamos encontrar un buen puñado de lanzamientos en edición física para sistemas clásicos, como ZX Knightmare o Speccy Bros para Spectrum, la edición cartucho de Mecha 8 del incombustible Óscar Toledo, o los libros ‘The Legend of Konami’, ‘Cohetes Rosas’ y ‘Beauty Bits & Lipsticks’. También había un puñado de consolas, accesorios y demás merchandising. En el mismo lugar nos encontramos con Retroworks, que trajeron a RetroMadrid todo su catálogo reeditado en edición física, con sus últimos juegos ‘Teodoro no sabe volar’ para CPC y MSX y JINJ2 para MSX en vanguardia. También presentaron ‘Brunilda’ para Spectrum 128k, una especie de juego de rol inspirado en la tradición Zelda de Nintendo del que hablamos hace unos días en RetroManiac.
Matranet como siempre trayendo un puñado de cosas interesantes
Justo enfrente nos detuvimos en la zona más Commodore de toda la feria, toda una hilera de mesas una junto a la otra que trajeron una representación de lo más interesante del mundo Commodore, ya sea C64 o Amiga. Allí estaban expuestos por ejemplo un estupendo Amiga 600, las habituales producciones de la demoscene o los particulares C64 personalizados de Bieno, quien además presentaba un par de juegos en clave aventura conversacional en edición física: ‘Mansión Kali’ y ‘Castillo Belmar’. Amigastore, Amicon y C4ever completaban un paraíso para los seguidores de los ordenadores de Amiga.
El 'lego Commodore' de Bieno. Siempre es una delicia encontrarnos con él
También nos dio tiempo a hablar largo y tendido con Gonzalo, artífice de la revista Games Tribune, y que traían a la feria un número especial sobre el retro. Gonzalo nos animó a seguir con nuestro proyecto y ya antes nos había ofrecido su ayuda tras los problemillas iniciales que tuvimos con la campaña de crowdfunding para sacar el número 7 de la revista en papel. Os contaremos más de esta conversación en otro artículo. Desgraciadamente no pudimos pararnos en el stand de Dreamcast.es, quienes el año pasado nos contaron encantados todos los avances que habían dado en la traducción y doblaje de Shenmue, y donde pudimos jugar por primera vez con Sturmwind, y que además venían esta vez acompañados por 'Sega Saturno'. Una verdadera lástima.Las máquinas arcade casi siempre atraen al mayor número de curiosos
Lo que si que pudimos hacer es pasar brevemente por el stand de Ardent Monkey Games, un joven estudio indie que había preparado un torneo de la conversión del famoso 'West Bank' para Android, comprarnos alguna camiseta en Legend T-Shirt, y admirar los muebles de Arcade Outlet. El día no daba para más, la aglomeración de visitantes había bajado un poco y era más sencillo de caminar entre los expositores, pero desgraciadamente era el momento de cerrar el recinto y recuperar aún más fuerzas con una buena cena antes del tirón de la última mañana del domingo. ¡Esto se acaba!
[¡sigue mañana!]