La Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense tiene facultades más amplias que las previstas y puede interceptar información sobre cualquier país excepto Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelandia, reveló hoy el diario The Washington Post.
Según documentos muy secretos obtenidos por el Post, la entidad de espionaje tiene actualmente una autoridad mucho más flexible de lo que hasta ahora se conocía, que le permite interceptar con mayor amplitud las comunicaciones a través de las compañías que brindan esos servicios.
Esta certificación, desconocida hasta la fecha, fue aprobada por la Corte de Vigilancia de la Inteligencia Extranjera (FISA) e incluida en un conjunto de documentos revelados por el excontratista de la NSA Edward Snowden, actualmente refugiado en Rusia.
La autorización también permite a la NSA obtener datos sobre entidades como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, la Unión Europea y la Agencia Internacional de Energía Atómica, además de que contiene una lista de 193 países de alto interés para la inteligencia norteamericana, afirma el rotativo. La NSA no necesariamente espía a todas las naciones u organizaciones mencionadas en la certificación, pero tiene autoridad para hacerlo si fuera necesario.
El subdirector para Asuntos Legales de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) dijo al Post que esta revelación evidencia una vez más el alcance de las actividades ilegales de las agencias de inteligencia y el papel insignificante que el sistema judicial desempeña en el control de esas acciones de espionaje doméstico.
La Oficina del Director de Inteligencia Nacional publicó un informe el viernes pasado en el que reconoce que en 2013 el Gobierno estadounidense obtuvo información de inteligencia sobre más de 90 mil individuos u organizaciones extranjeras.
Sin embargo, activistas de la ACLU y abogados de empresas de alta tecnología aseguran que esta es una cifra demasiado baja, teniendo en cuenta que varios miles de millones de personas utilizan a nivel global los servicios de correos electrónicos e Internet proporcionados por compañías norteamericanas./PL