River no cumplió con las expectativas en su debut frente a Tigre, a pesar de que vencieron al conjunto de Caruso por 1-0 con el gol de Rogelio Funes Mori, tras un gran desborde por el sector izquierdo del inoxidable Ariel Ortega.
El equipo de Ángel Cappa, como durante toda la pretemporada, no logró crear juego ni situaciones de gol a pesar de tener tres creadores natos de juego como Ortega, Buonanotte y Lanzini. Los Millonarios respetaron el libreto que pregona su DT pero les costó y cayeron en la imprecisión y la monotonía.
El Tigre de Ricardo Caruso Lombardi planteó un partido inteligente, rompiendo el esquema futbolístico del equipo de Nuñez y estuvo cerca de romper la paridad en varias ocasiones pero entre Carrizo y los palos salvaron el arco local. Las jugadas más claras del partido, salvando el gol de Funes Mori, fueron del Matador. Martín Galmarini estrelló un derechazo en el palo izquierdo del arquero que volvió al club en el que surgió futbolísticamente tras un paso decepcionante por el fútbol europeo. Ya en el segundo tiempo Diego Castaño remató desde media distancia pero Carrizo contuvo con solvencia.
River también tuvo sus chances, aunque menos claras e importantes que las que tuvo el conjunto de Victoria. Cuando el partido se moría y el resultado era un empate clavado a cero, un pelotazo frontal de Juan Pablo Carrizo encontró a Ariel Ortega, que anticipó a un defensor de Tigre, desbordó por el sector izquierdo del área y tiró el centro atrás que encontró a Funes Mori dentro del área, quien solo empujó la pelota a la red con un sutil cabezazo.
River, sin jugar bien, empezó ganando y sumó tres puntos claves para empezar con el pie derecho el Apertura 2010. Tendrá que mejorar mucho si quiere pelear el campeonato y olvidarse del promedio. Achicó la diferencia con respecto a sus rivales por la promoción, aunque un equipo como el de Cappa tiene que, indefectiblemente, pensar más en luchar el campeonato que en evadir el descenso.
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