River cierra el 2017 con un sabor agridulce, no sólo por la pérdida de la Copa Libertadores de una manera impensada sino porque a los éxitos deportivos no se han agregado (como debería suponerse) los éxistos económicos.
En otra plataforma de blogging he escrito una serie de artículos relativos al tema que paso a transcribir.
Los títulos de River en la era Gallardo.
No hace mucho en un post habíamos planteado la alternativa de hasta donde podía llegar este River de Marcelo Gallardo.
Y planteábamos dos alternativas: brindar con el vaso medio lleno (para usar una metáfora ahora que estamos cerca de las fiestas de fin de año) o brindar con el vaso medio vacío.
El vaso lleno significaría haber ganado todo. Y todos sabemos que no es asíi. El Flamengo fue el principal obstáculo que River encontró en su camino para lograrlo.
El vaso medio vacío hubiera significado no haber ganado absolutamente nada. Y también sabemos que la realidad fue distinta bajo este otro otro aspecto. La contundente victoria ante Central Córdoba de Santiago en Mendoza el viernes de la semana pasada y la consecuente obtención de la Copa Argentina (la tercera historial) le permitió no solo el acceso directo a la próxima Copa Libertadores, sino también cerrar el año con una gram sonrisa y una discreta felicitad.
Entonces: lleno o vacío?
Seguramente el vaso está por la mitad. Si bien in título no puede compararse con el otro son, de todos maneras, trofeos que van a aumentar cuantitativamente las ya pobladas vitrinas millonarias.
A esto deberíamos agregar un excelente posicionamiento en la Superliga (algo inédito en los River de Gallardo a esta altura del año). Que podría hacerlo saltar a la punta si le gana a Independiente el partido pendiente el 19 de enero próximo.
De esta manera tendría todas las cartas en la mano para aspirar al único título que falta en esta era "gallardista": el torneo local, hoy llamado Superliga.
Y por supuesto la Copa Intercontinental, hoy Mundial de Clubes, que supo ganar una sola vez con aquel fantástico gol de Antonio Alzamendi contra el Steaua de Bucarest de Rumania el 14 de diciembre de 1986 en Tokio tras un tiro libre realizado rápidamente por Norberto Alonso. Ese River estaba dirigida por Héctor Rodolfo Veira.
Por lo tanto, si. El vaso por la mitad está bien.
Todos los títulos de River en el ciclo de Marcelo Gallardo.
Hagamos un repaso entonces de las 11 copas ganadas por River desde que el cuerpo técnico que dirige Marcelo Gallardo asumió la dirección técnica, hace poco más de 5 años, exactamente el 30 de mayo de 2014:
COPA SUDAMERICANA 2014:
River Plate, con goles de cabeza de Gabriel Mercado y Germán Pezzella, venció el miércoles 2-0 a Atlético Nacional de Colombia y se consagró por primera vez campeón de la Copa Sudamericana después de 17 años sin éxitos en el campo internacional.
RECOPA SUDAMERICANA 2014.
Como ganador de la Sudamericana, River se enfrentó con San Lorenzo, campeón de la Libertadores. En ambos partidos lo derrota por 1 a 0.
River Plate se adjudicó la Recopa Sudamericana por primera vez en su historia al ganarle a San Lorenzo por 1-0, en el duelo de equipos argentinos por la segunda final de este trofeo continental, jugado la noche del miércoles en el estadio Nuevo Gasómetro en Buenos Aires.
Como en el encuentro de ida, en el Monumental, River, el campeón de la Copa Sudamericana 2014, ganó por la mínima diferencia, con gol anotado por el volante uruguayo Carlos Sánchez a los 67 minutos.
COPA LIBERTADORES 2015.
Tras eliminar a Boca, su clásico rival en octavos, River gana la Copa Libertadores al derrotar en la final a Tigres.
Bajo la lluvia y en una final épica, el Millonario se impuso 3 a 0 a Tigres de México con goles de Alario, Sánchez y Funes Mori. El Monumental explotó con el festejo.
Los goles los aportaron, en orden cronológico, Lucas Alario (a los 44 del primer tiempo), el uruguayo Carlos Sánchez (a los 29 del segundo período, de penal) y Ramiro Funes Mori (a los 33).
COPA SURUGA BANK 2015.
El certamen que enfrenta al campeón de la Copa Sudamericana con el ganador de la Copa J-League de Japón le sirvió a Marcelo Galalrdo para sumar el cuarto título de su ciclo con una cómoda victoria 3-0 sobre Gamba Osaka.
Los millonarios sumaron el noveno título internacional de su historia, el cuarto con Gallardo como técnico. Desde que asumió hace un año, el Muñeco ganó todas las copas internacionales que disputó: la Sudamericana 2014, Recopa 2014, Libertadores 2015 y Suruga Bank 2015.
Los millonarios volvieron a Japón, tras 18 años, y levantaron la Suruga Bank al golear 3-0 a Gamba Osaka , con los tantos de Carlos Sánchez de penal, Mercado y Pity Martínez .
RECOPA SUDAMERICANA 2016.
En Febrero de 2016, derrotó a Independiente Santa Fe por la Recopa Sudamericana.
El certamen se disputó entre el campeón de la Copa Libertadores 2015, River Plate y el campeón de la Copa Sudamericana 2015, Independiente Santa Fe. El campeón fue River Plate al ganar 2-1 en el resultado global.
River Plate de Argentina conquistó la Recopa Sudamericana por segundo año consecutivo al vencer a Independiente Santa Fe de Colombia por 2-1, fruto de un ambicioso planteo ofensivo y mayor control del juego, en el partido de vuelta disputado en Buenos Aires.
Los goles de los 'Millonarios' fueron marcados por Sebastián Driussi (3) y Lucas Alario (51). Marcó el descuento el defensor Horacio Salaberry (65). En el partido de ida habían igualado 0-0 en el estadio El Campín de Bogotá.
COPA ARGENTINA 2016.
Fue el primer título a nivel local para Gallardo. River derrotó en un emocionante partido 4 a 3 a Rosario Central.
En un partido para la historia, el equipo de Marcelo Gallardo venció 4-3 a Rosario Central en Córdoba y se quedó con el trofeo. Además, clasificó a la Copa Libertadores del año que viene.
La noche comenzó bien y se puso negra en dos oportunidades. River lo ganaba con gol de Alario de penal y en minutos lo pasó a perder 2-1, para irse al descanso con un merecido 2-2 que también llegó por el delantero, ambos desde los doce pasos.
En el complemento, Central volvió a golpear y ahí fue cuando apareció Alonso, recién ingresado, para bajarle la pelota a Alario para que marcara su tercer gol. Acto seguido, fue el 13 quien le bajó el balón al uruguayo para que éste, con la punta de uno de los botines, escribiera su nombre en la historia de River. Fue 4-3, fue festejo, fue desahogo.
COPA ARGENTINA 2017.
Luego de ser eliminado en semifinales de la Copa Libertadores por Lanús en un partido increíble por 3 a 2 luego de ir ganando por 2 a 1 River logró sobreponerse al impacto y ganó la Copa Argentina.
River se puso en ventaja a través de Ignacio Scocco en el primer tiempo, a los 7 minutos. Lo empató Luis Miguel Rodríguez a los 11. En el inicio del segundo tiempo, Nacho Fernández metió un golazo.
Fue el título 7 en la gestión del entrenador Marcelo Gallardo. Y también valió un alivio grande luego de la amargura en la Libertadores.
SUPERCOPA ARGENTINA 2017.
Una de las copas de mayor valor anímico para River a nivel local (junto con la Libertadores que ganaría al año siguiente frente al mismo rival). No por su valor intrínseco ni porque su rival fue. Bada menos, que Boca Juniors al que derrotó por 2 a 0 en la final disputada en el estadio Malvinas Argentinas, de la ciudad de Mendoza.
A los 17 minutos, Nacho Fernández y Pity Martínez armaron una pared por derecha y cuando el ex mediocampista de Gimnasia entró al área lo tocó de atrás Cardona que retrocedía en la marca.
Patricio Loustau no dudó y cobró el penal que el Pity transformó en el 1-0 con un toque sutil contra el poste derecho de Agustín Rossi.
De contra River le dio el golpe de nocaut. Con una corrida memorable de Nacho Fernández -otra de las figuras- el centro al medio del Pity y el toque al gol de Ignacio Scocco, quien minutos antes había entrado por Pratto.
COPA LIBERTADORES 2018.
Lcopa que será recordada por mucho tiempo por las polémicas que rodearon el partido de vuelta a jugarse en el estadio de River. El micro que transportaba a los hinchas de Boca fue apedreado y el "xeneize" se negó a jugar el partido aduciendo que no estaba en condiciones anímicas de hacerlo. Después de muchas idas y vueltas la Conmebol decidió que el partido se jugara en el estadio "Santiago Bernabeu" del Real Madrid en España.
River comenzó perdiendo el partido pero logró empatarlo dentro del tiempo reglamentario. En el suplementario lo dió vuelta ganando por 3 a 1.
"El Xeneize" se adelantó con gol de Darío Benedetto a los 42 minutos del primer tiempo. Igualó Lucas Pratto a los 22 minutos de la segunda parte.
En el alargue, "El Millonario" consiguió el título gracias a los goles de Juan Fernando Quintero -un verdadero golazo desde fuera del área- y Gonzalo "Pity" Martínez en una corrida solitaria cuando terminaba el partido, con todo Boca -incluyendo el arquero Andrada- en el área rival.
RECOPA SUDAMERICANA 2019.
Jada al mejor de dos partidos River perdió con Athletico Paranaense, campeón de la Sudamericana, por 1 a 0 pero logró darlo vuelta en el Monumental ganando por 3 a 0.
River Plate llegó a la final como campeón de la Libertadores y el Paranaense de Curitiba como titular de la Sudamericana.
El marcador global había quedado empatado cuando Ignacio Fernández mandó al fondo del arco la pelota rebotada de un tiro penal que le había tapado el arquero Santos, a los 65 minutos. La pena fue sancionada por mano de Lucho González que comprobó el árbitro chileno Roberto Tobar con el VAR.
La segunda anotación, en tiempo de descuento, fue de Lucas Pratto con un remate de pierna derecha, tras bajar la pelota de un pase alto y acomodarse frente al bloqueo desesperado del arquero Santos al minuto 90+1.
El broche de oro lo puso Matías Suárez al tocar suave el balón dentro del arco, al terminar el partido, a los 90+5 tras dejar en el camino al guardameta.
Ironía de la suerte los equipos dirigidos ténicamente por Marcelo Gallardo no han podido, hasta la fecha, ganar el certamen local, ahora llamado Superliga.
COPA ARGENTINA 2019Después de una dura derrota en la final de la Copa Libertadores ante Flamengo que no le permitió ser bicampeón de América, el Millonario venció 3-0 a Central Córdoba de Santiago del Estero, consagróndose campeón de la Copa Argentina por tercera vez en su historia y clasificándose directamente a la zona de grupos a la Copa Libertadores 2020 (ya estaba clasificado pero para en zona repechaje).
Un River contundente y concentrado goleó al equipo santiagueño que, a fuerza de garra y lucha, solo pudo oponerle resistencia durante el primer tiempo.
Sobresalieron las actuaciones de Ignacio "Nacho" Fernández especialmente, de Ignacio Scocco y de Fausto Armani. El resto pudo un nivel sólido y parejo.
Las dos derrotas de River.
River sufrió en los últimos diez días dos derrotas. Una que le ha dolido en el alma a los hinchas "millonarios" por las circunstancias en las que se produjo y por la convicción, hasta los últimos minutos, que estaba prácticamente ganada.
Y la otra menos, menos mediática, menos conocida, pero no por eso menos importante.
La primera se encuadra dentro de las llamadas derrotas deportivas. La segunda (si el término fracaso suena demasiado fuerte) podemos llamarla derrota económica.
La derrota deportiva.
La derrota de River, dolorosa, inesperada a manos de Flamengo ya la tratamos en este artículo por lo cuál no vamos a continuar extendiéndonos al respecto.
Duele, y duele mucho, obviamente. Pero como dice el verdadero hincha: "ya pasó". A mirar para adelante. La recepción que tuvo el plantel de Gallardo al llegar al Monumental, al regresar de Lima, fue conmovedora.
Pareciera que el "Muñeco" tuviera un contrato de por vida con la hinchada "millonaria" que nada ni nadie puede romper. Es amor puro. Al margen de los resultados.
En un artículo publicado no hace mucho nos preguntábamos Hasta dónde puede llegar el actual equipo de Gallardo y nos planteábamos la hipótesis que, a fin de año, podía llegar con la manos llenas o vacías. Hasta ahora está mitad y mitad según el criterio de quien quiera ver la copa medio vacía o medio llena.
La Copa Argentina puede significar una revancha, si se gana. Pero difícilmente pueda llegar a eliminar el dolor de haber perdido la Libertadores.
Pero, a pesar de todo, ningún analista deportivo con un mínimo de criterio objetivo, se atrevería a tildar de fracaso este traspié.
Con Gallardo River ha ganado 10 copas entre nacionales e internacionales. Y eso el hincha. Lo siente. Y se lo agradece.
Por eso nos atrevemos a dejar el título como está. Derrota, no fracaso.
La derrota económica.
La segunda derrota, menos visible, menos mediática fue la presentación del balance de River una semana antes de la final con Flamengo.
Tal vez intentando hacer pasar inobservados, en un momento de euforia futbolística pre-final, resultados que alarman por lo negativo.
Cuando River presenta el balance tan fuera de término como lo hizo este año es porque hay problemas serios (lo mismo sucedió el año pasado).
Cuando la dirigencia no se había dejado contagiar por una excesiva pasión futbolística y transfería al menos un par de jugadores por año, los números eran distintos. Hasta se llegó a presentar en forma ininterrumpida tres balances con superávit. En tiempo y forma. Como si no hubiera nada que ocultarle al hincha.
Es sabido que el presidente de River es uno de los más ardientes defensores del modelo neoliberal que ha azotado Argentina por cuatro años. Y de su exponente principal el presidente Mauricio Macri. Algo que comparte con el presidente de Boca. Aunque éste es también usado políticamente para otros fines.
Este pretende ser un artículo deportivo y, por lo tanto, haremos abstracción de cualquier contenido político. Los datos que se exponen corresponden a la más pura y cruda realidad.
Las preguntas que muchos hinchas tienen todo el derecho de hacerse son:
a) Cómo es posible que, sabiendo que la política económica del actual gobierno propende por la libre fluctuación del dólar en un país como la Argentina donde todo el mundo especula, se haya mantenido un plantel dolarizado al completo, sin realizar ninguna transferencia, sabiendo cuál iba a ser el resultado económico final?
b) Cómo es posible que los dirigentes, en un alarde barcelonesco, hayan mantenido la casaca sin sponsor durante casi un año?
c) Cómo es posible que muchos clubes puedan transferir sus jugadores, con menos cartel y renombre de los "millonarios" -en algunos casos a valores absolutamente mayores?. Citemos dos ejemplos: Magallán de Boca y Martínez de Rácing.
d) La estampida del dólar no es casual. Nunca lo ha sido en Argentina. Siempre ha obedecido a un plan preconcebido por el sector conservador y neoliberal para tratar de maximizar sus ganancias a nivel estratosférico. La excusa de las devaluaciones para favorecer las exportaciones ha sido siempre un recurso tratando de ocultar los verdaderos objetivos. Los dirigentes de River han atravesado por todas estas etapas de la historia argentina. Saben a que conduce. Desde la Junta Militar, pasando por Menem y De La Rúa hasta llegar a Macri. Devaluaciones controladas al mejor estilo Martínez con sus "tablitas" o salvajemente libres como las restantes. El resultado no cambia. Quien se endeuda en dólares es irresponsable o suicida.
e) En muchos países del mundo, especialmente en Europa, los clubes de fútbol en realidad son sociedades anónimas. Italia es un ejemplo. El presidente de River ha siempre propugnado una solución de este tipo adaptada a las exigencias del mercado local. Alguien puede imaginarse una situación como la actual siendo River una sociedad anónima donde el mismo presidente y dirigentes debieran responder con su patrimonio personal por el endeudamiento del club? Es muy difícil. En una situación similar seguramente la cautela y la precaución guiaría sus pasos.
f) Ahora el club de Nuñez se encuentra en la disyuntiva de salir a transferir sus jugadores en forma desesperada y seguramente lo hará muchas veces a un valor inferior al registrado en el balance o al de su propia cotización. Y muchos de ellos como el ejemplo de Palacios ante la posibilidad de ser transferidos al fútbol europeo con sueldos en euros ni siquiera aceptan un aumento en la cláusula de rescisión del contrato. Por el talentoso volante a River le quedarían solo 11.250.000 euros menos de la mitad de lo que le quedó a Rácing por Lautaro Martínez y la mitad de lo que le quedó a Boca por Lisandro Magallán. Iría a jugar en el mismo equipo de Alario.
g) Pareciera que la experiencia del año pasado cuando River tuvo que vender a un precio casi irrisorio al Pity Martínez no haya servido como ejemplo.
El problema no es vender sino malvender.
Los números de la cruda realidad económica.
Para tener una idea del balance de River veamos los números en síntesis (valores expresados en pesos al 31 de agosto de 2019):
Activo: $ 5.073.203.577
Pasivo (Deudas): $ 3.998.735.404
Patrimonio neto: $ 1.074.468.173
Pérdida del ejercicio: $ 859.880.151
El presidente de River sostiene que la situación no es preocupante, que es suficiente vender a un jugador para solucionar el problema. Es decir, aparentemente la dirigencia no tiene intención de cambiar el modelo.
Pero la simplificación del presidente es poco menos que absurda. Como si ningún contador en la comisión del club le dijera que estos números son inviables.
La pérdida del ejercicio es igual al 48% del patrimonio neto. Es decir digámoslo de otra manera para entendernos mejor: En el último año River perdió en un solo ejercicio la mitad de su capital.
Si este gobierno y esta política económica hubieran seguido y los criterios del club de Núñez no hubieran variado, en dos años River entraba en default.
Confrontemos estos números con los del ejercicio anterior (al 31 de agosto de 2018):
Activo: $ 4.837.528.895
Pasivo (Deudas): $ 3.052.132.595
Patrimonio neto: $ 1.785.376.300
El patrimonio neto (lo que comúnmente llamamos el "capital de una empresa" se redujo casi a la mitad de 1.785.376.300 a 1.074.468.173) mientras las deudas aumentaron un 30% (de 3.052.132.595 a 3.998.735.404).
Si bien es cierto que la cotización actual del plantel según TransferMarket -tal vez el sitio más jerarquizado en la materia- asciende a los 154,4 millones de euros lo que arrojaría un valor total del plantel profesional superior a los 10 mil millones de pesos (en este caso las deudas representarían el 40% del valor total del plantel) no es menos cierto que los valores de mercado tienen una relación directa con los triunfos logrados. Hace un año esta misma cotización de TransferMarket no superaba los 100 millones de euros.
Evidentemente o a los directivos de River les interesa muy poco el futuro económico del club pensando más en sus triunfos que en sus finanzas o sus conocimientos sobre economía empresarial son muy escasos.
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