River traicionó su historia y descendió a la B Nacional

El 26 de junio de 2011 no va a ser un día más en la historia del fútbol argentino, eso es obvio. Todos lo sabíamos, tanto los hinchas de River como los de Boca, Independiente, Racing y hasta los que no entienden mucho de fútbol. Y los 22 jugadores que salieron al verde césped del Monumental también demostraron que estaban al tanto de la situación.

Quizás no fue el partido más vistoso para presenciar. Pero sí quedó claro que los de River y los de Belgrano salieron a comerse la cancha, a dejar la piel en cada jugada y a arriesgar sus piernas en cada dividida. A los 4 minutos llegó la primera emoción de la tarde, junto con la primera polémica: gol anulado a Belgrano por offside. Pocos lo advirtieron en un principio, pero había dos jugadores del Pirata adelantados con el cabezazo de César Pereyra.

Sin tiempo para respirar, Pavone aprovechó un grueso error de la defensa cordobesa y estampó el 1-0 a los 5 minutos. Puños apretados y esperanzas renovadas para los hinchas Millonarios, que no podían creer su suerte, esa que le ha sido esquiva en estos últimos meses. Sin muchas ideas pero con convicción, el equipo de J.J. López se arrimaba al arco de Olave. Pavone y Caruso aguantaban arriba, mientras que Pereyra y Affranchino estaban imparables por las bandas.

No se puede decir lo mismo sobre Acevedo y Lamela, que aparecieron poco y nada para crear juego. En tanto, Arano y Ferrero se desbordaban de los nervios que tenían. En ese contexto y comandado por el “Mudo” Vázquez, Belgrano comenzó a inquietar a Carrizo, que tuvo que intervenir un par de veces para defender el cero.

En medio de todo esto, hubo polémicas. A destacar: Pavone debió ser expulsado, al igual que Lollo, y a Caruso no le cobraron un clarísimo penal que pudo haber significado el 2-0. El arbitraje de Sergio Pezzotta dejó mucho que desear y, encima, dejó que Arano siguiera pegando con una amarilla en su haber.

En el complemento llegarían todas las emociones. El “Picante” Pereyra despilfarró una situación clarísima e hizo recordar a aquel gol malgastado por Claudio Bustos en la Promoción de 2009 frente a Racing. Sin embargo, esta vez el destino parecía estar escrito para el Pirata. Porque a los 16 minutos Arano perdió una pelota en mitad de cancha y unos segundos después Juan Manuel Díaz –en su intento por despejar- le hizo rebotar el balón a Ferrero. Guillermo Farré aprovechó este horror y estampó el 1-1.

Parecía liquidado el pleito, pero a River le dieron una vida más con un penal a su favor. El encargado de ejecutarlo fue Pavone, el más peligroso de los Millonarios y quien se había puesto el equipo al hombro. Sin embargo, cuando uno está mal, todo sale peor. El Tanque pateó al medio y Olave contuvo el tiro desde los doce pasos. Faltaban 21 minutos, pero ahí fue cuando se terminó todo.

El resto quedó para que un desesperado River intentara descontar sin éxito. El fracaso ya estaba consumado. Obviamente algunos “hinchas” cometieron desmanes y el encuentro no pudo terminar. En un hecho histórico sin precedentes, el Millonario se fue a la B. Habrá mucho que discutir sobre las responsabilidades de los dirigentes, tanto los actuales como los anteriores. Lo cierto es que hoy, 26 de junio de 2011, River no pudo en los 90 minutos y bajó a la segunda categoría en un emotivo encuentro. Ah, Belgrano es de Primera.