River y su crisis: opinan los protagonistas

Tras la fea derrota entresemana ante Boca, River volvió a perder, esta vez como local ante Argentinos por 1-0, sumó su quinto  partido perdido en once fechas (está 16º) y su caída parece no tener fondo. El promedio ya no se toma como chiste para el equipo de Nuñez.

Tres protagonistas del mundo riverplatense analizan este difícil presente:

Ortega, con su problema de alcoholismo, y Gallardo, con dos operaciones de pubialgia encima, que son dos ex jugadores, son mejores que todos los que trajeron hace menos de tres meses. En River no se pueden comprar más jugadores de medio pelo, sino jugadores lo suficientemente distinguidos como para ponerlos en la cancha y hacer rendir y levantar a nuestros pibes”.

Hugo Santilli, ex presidente

No faltó actitud, sino fútbol. Los momentos difíciles son para hombres y no hace falta tener 18 ó 35 años para poder afrontarlos. Esto va a depender, como siempre, del que muestre ganas y responda en el campo de juego. El que no, quedará afuera… Me preguntan de los chicos y por ahí no es el mejor momento porque la responsabilidad es muy grande y ya dije que hay que llevarlos de a poco, pero la necesidad hace que los tengamos que usar”.

Leonardo Astrada, técnico

Si no ponemos a los chicos, hay que poner al Súper 8, porque no hay más jugadores. Es la realidad del club” (…) “Tenemos la suerte de contar con un grupo fuerte, bastante unido, que respalda al cuerpo técnico. Le estamos poniendo el pecho a 10 años de malas decisiones en el club. Somos los encargados de salvar a este River”.

Matías Almeyda, capitán

Mientras, los pibes de River se desangran con cada actuación del equipo. Todavía con edad de juveniles, chicos como Funes Mori, Villalva, Pereyra, Mauro Díaz o Affranchino se incineran fecha a fecha. Que ponen entusiasmo, no puede negarse, pero con eso no les alcanza para poder ensamblarse en un equipo en ruinas. Funes Mori, por ejemplo, está en la mira por los goles que se erró frente a Boca. Apenas tiene 18 años y mínima experiencia en Primera, acompañado por un conjunto que pelea por ser el peor de toda la historia del club. ¿Por qué mientras River está en llamas, Passarella no dice una palabra?