¿Os gustan los helados? ¿Y las heladerías tradicionales de toda la vida? Pues este post os va a gustar especialmente, ya que hará las delicias de todos, no solo por los exquisitos productos que elaboran en el lugar del que voy a hablaros, sino por el exclusivo diseño que presenta el establecimiento, una heladería que auna interiorismo, creatividad en el proyecto y originalidad en la presentación de sabores. ¿Puede alguien resistirse a estas particularidades?
Rocambolesc, da nombre a una maravillosa heladería que se encuentra en Gerona y se trata, ni mas ni menos, del nuevo proyecto llevado a cabo por los hermanos Roca. Uno de ellos, Jordi, experto repostero y nombrado uno de los mejores del mundo ha creado en el restaurante El Celler de Can Roca, propiedad de sus padres, novedosos postres que le han catapultado a la fama, y de los cuales ha decidido reflejar su sabor en forma de helado en Rocambolesc.
Presenta aspecto de cuento, un lugar divertido y lleno de imaginación donde adentrarse y disfrutar de su ambiente, caracterizado por notas de aspecto vintage, ya que se observan detalles de tipo industrial y elementos tradicionales como pueden ser ventiladores de aspa o los conductos de acero vistos que confieren dicho carácter con sabor retro al local.
El diseño ha sido llevado a cabo por el estudio de interiorismo de Sandra Tarruella, apostando por crear un mundo de fantasía, cálido y luminoso, donde utilizan para ello, materiales como la madera en suelo y estanterías, y apuesta por un azul pastel en una de sus paredes que transmite dinamismo y ensoñación, elecciones importantes a la hora de reflejar estilos y sensaciones.
Son muchos los detalles a destacar que dan forma a este singular espacio, piezas coordinadas que desarrollan una temática, como puede ser un original mostrador que simula un carrito de helados con las ricas especialidades de sabores presentadas en el mismo, así como un espejo que destaca en uno de sus laterales, el cual genera sensación de amplitud y se ha utilizado para escribir en él la variedad de gustos y productos que ofrecen, complementado por un original banco adherido a una bicicleta de corte clásico, elementos cuidades que aportan al conjunto imagen de marca.
En la pared frontal destaca una gran máquina de fabricar helados, como las de antes, con sus espirales y engranajes, que han representado y montado, porque no solo está ahí para ambientar, sino que funciona y es la encargada de preparar los pedidos al mismo tiempo que emite luces y sonidos típicos de estas maquinarias.
En otra de las paredes, encontramos un dispensador de tarrinas realizado con lamas verticales en madera, donde se disponen perfectamente alineadas y ordenadas, así como una serie de baldas donde se presentan gran variedad de botes y productos perfectamente organizados. También observamos un juego de tuberías en la parte baja que recorre dicho espacio, de donde cuelgan bonitas bolsas, y pequeñas estanterías en las que se han colocado cucharillas, servilletas, donde cabe destacar el cuidado diseño del packaging llevado a cabo por Run desing, y que merece una mención especial por la línea desarrollada, guardando una perfecta armonía con el resto del establecimiento.
Helados artesanos y elaborados a base de productos naturales, permiten experimentar dulces sensaciones gracias a sus seis variedades de sabor a las 34 variedades de toppings que ofrecen para personalizar cada helado y convertir su presentación en un plus de diversión y creatividad.
¿Conocíais Rocambolesc? ¿Alguna heladería similar que tenga un bonito diseño y os gustarúa recomendar? Este tipo de establecimientos siempre es un auténtico placer conocerlos.
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Muchos besos!!!
Imágenes: Diario Design