Rojo y Negro

Inesperado desenlace el del Turco Mohamed en Independiente. De estar en la cresta de la ola con la obtención de la Copa Sudamericana a fines del 2010 a esta renuncia post derrota con Boca, paradójicamente el club que lo “hizo renunciar” en Colón y Huracán anteriormente.

Ni siquiera se especulaba esta decisión cuando a las 18 horas comenzó el clásico. Sin embargo, el resultado cayó como una bomba, y las palabras de hoy por la mañana de el propio entrenador aclaran un panorama que, lejos de ser alentador, habla de una relación íntima entre la dirigencia del club de Avellaneda y su barra brava.

“Fue un mensaje muy claro. Comparada fue al vestuario, discutió fuerte con algunos jugadores y a los cinco minutos estaba la barra en la puerta”

“El club fue campeón internacional, va a jugar la próxima Sudamericana, está a tres puntos de meterse en la próxima Libertadores. Así que el tema deportivo no es…”

Dijo el Turco, que dirigió al Rojo en 51 partidos, con una efectividad del 43,8% de los puntos luego de 16 triunfos, 19 empates y 16 partidos.

La complicidad de Comparada en todo este asunto no es más que una muestra de lo que vive actualmente nuestro fútbol, donde estas mafias manejan el club desde adentro y se reparten el dinero junto al presidente. El mismo técnico aclaró que el 90% del estadio no lo estaba insultando, e incluso pudo verse en las cámaras de Paso a Paso cuando desde la popular comenzaron a escucharse los cantos discriminatorios hacia el público xeneize (cuando Baldassi para el partido), que el resto del estadio empezó a alentar por su propio equipo.

Más allá de las broncas, los únicos que pudieron ingresar a insultar a los jugadores a la puerta del vestuario fueron estos muchachos que se hacen llamar “hinchas”. Las puertas abiertas, los espacios liberados para ir a increpar al plantel demuestra la incapacidad de Comparada y compañía para decir las cosas de frente.

Haciendo uso y abuso de su poder, con una deuda importantísima a nivel económico, con una cancha a medio terminar y ahora, cerca de los puestos de promoción, el panorama de Independiente se tiñe de rojo de mano de su actual dirigencia. En diciembre habrá elecciones, quizás el cambio sea alentador y estas cosas no sucedan más.